viernes, 29 de enero de 2010

Binner garantiza tarifazos de luz y agua, pero no la luz y el agua

Miles de rosarinos continúan sin servicios de luz y agua mientras el Servicio Meteorológico anuncia que el grado de alerta por las altas temperaturas es “naranja” siendo el índice de mortalidad entre un 30 y 60 por ciento. El gobierno santafesino llama a tomar precauciones mientras nos dejan sin los recursos básicos para paliar las altas temperaturas.
Los funcionarios y políticos patronales oficialistas y de la oposición pretenden ‘resarcir’ a los afectados por los cortes de energía de más de 15 horas, devolviendo los kilovatios no prestados, un chiste de mal gusto. Este ‘resarcimiento’ les costaría mucho menos que las inversiones necesarias para solucionar definitivamente los cortes de energía eléctrica, que según ellos mismos sería de 1539 millones de pesos. Por otro lado es mentira que el consumo de electricidad haya crecido de forma inmedida e imprevisible, si comparamos el máximo consumo de enero de este año (1.726) con el del verano pasado (1.690 ) solo subió 36 MW.
Los cortes son el resultado de la desinversión durante los gobierno del PJ pero también de los dos años de gobierno de Binner, que en lo que va de su gestión aumento la electricidad un 102% sin mejorar un ápice el servicio. Hace días Binner anunció un plan de aumentos progresivos de las tarifas de luz y agua que ni siquiera prevé un plan de inversión, de extensión de los servicios o reparación de las instalaciones que dejan continuamente a los santafesinos sin luz.
La suba de las tarifas se suma al impuestazo del inmobiliario y de las patentes y al prometido aumento del transporte. Pero mientras la canasta familiar y el costo de vida siguen subiendo los sueldos siguen congelados.
Los vecinos de la ciudad respondieron rápidamente con los métodos de lucha de la clase obrera: los piquetes. Es que a la luz de la vela quedó al desnudo el verdadero rostro de ‘socialismo’ binnerista: tarifazos, impuestazos, apagones, inflación, congelamiento salarial y desocupación.
El Partido Obrero llama a reforzar la lucha contra los cortes de energía y agua, mediante autoconvocatorias de los vecinos y en los lugares de trabajo. Que el Estado invierta el dinero necesario para garantizar los servicios de luz y agua. Resarcimiento inmediato en efectivo por los daños causados. Ningún tarifazo ni impuestazo, que se anulen los últimos aumentos. Que los recursos provinciales salgan de un impuesto progresivo a las grandes empresas y grupos agro-exportadores y de la actualización de los valores impositivos de los campos de los grandes propietarios rurales, con el aumento de la alícuota.

PARTIDO OBRERO Santa Fe - 30/01/10

lunes, 25 de enero de 2010

La investigacion de la deuda es una distraccion politica del centroizquierdismo

Comprometido con los gobiernos que la contrajeron y refinanciaron

De la dictadura a la democracia, del neoliberalismo al nacionalismo, un hilo conductor recorrió a todos los regímenes y gobiernos de las últimas cuatro décadas: la malversación del presupuesto y de la economía nacional en favor del capital financiero, a través de la deuda externa.
Bajo la dictadura, Martínez de Hoz y su "programador" Walter Klein, un agente del Barclays, el Credit Lionnays y otros bancos, usaron a YPF y a otras empresas estatales para desatar un gigantesco operativo de endeudamiento, ejecutado bajo "regulación" del FMI. El Banco Central ni siquiera llevaba un registro integral de estas operaciones de deuda. Con similar furor, la burguesía nacional elevaba la carga de la deuda privada. Pero se trataba de "autopréstamos, con los cuales financiaban la fuga de capitales del país. En vísperas de la devaluación del peso, el Banco Central, bajo la dirección de Cavallo, les aseguró el tipo de cambio, lo que permitió que gran parte de la deuda privada se convirtiera en deuda pública. Como la deuda privada se había contraído con bancos y compañías de seguros que tenían garantías de los países europeos afiliados al Club de París, la deuda entre privados se convirtió en una deuda pública de Argentina con los gobiernos del Club de París
La democracia debutó con el reconocimiento integral de esta malversación, bajo el concepto general de continuidad jurídica del Estado. La democracia se convirtió en garante de los contratos suscriptos por la dictadura. La clase social que lucró con los militares convirtió a la democracia en su propio régimen político.
La incapacidad para pagar esta deuda impagable fue el pretexto del que se valieron Menem y Cavallo para canjearla por nueva deuda, ahora en bonos. Asimismo, los depósitos de los ahorristas argentinos en los bancos fueron convertidos también en bonos - lo que implicó una fuerte desvalorización de los ahorros (Plan Brady). Fue el antecedente del ‘corralito' y el ‘corralón' de 2001/2. Este paquete fue negociado en Punta del Este, en enero de 1990, entre Cavallo y John Reed, entonces presidente del Citibank. Catorce años más tarde, William Rhodes, también del Citi, llegaría a un arreglo con Lula para el pago de la deuda externa de Brasil, que dio luz verde al gobierno encabezado por el PT. Desde 1982, la deuda externa argentina no es otra cosa que una espiral formada por refinanciaciones de vencimientos determinada por la incapacidad de pago. Una suerte de Circular 1050, en referencia al sistema de crédito hipotecario implementado por la dictadura, que capitalizaba los intereses de las deudas por compra de viviendas, que terminaron superando varias veces el valor de la propiedad. A renglón seguido, el gobierno entregó las empresas estatales a cambio de títulos de deuda, a los cuales reconoció el ciento por ciento de su valor de emisión cuando en el mercado se había comprado a precios que oscilaban entre el 10 y el 25%. En el negociado entraron los bancos internacionales y, en especial, la burguesía nacional - con Techint, Pérez Companc, etc. Lo mismo ocurrió con la privatización de YPF, que fue comprada con deuda por parte de Repsol, que puso como garantía de pago los bienes de la petrolera estatal. Los K formaron la barra brava que apoyó este desfalco. Aun así, la deuda no bajó sino que creció con los nuevos préstamos requeridos por Menem-Cavallo para financiar el presupuesto y, por sobre todo, el enorme agujero que le dejó a la Anses la transferencia de los aportes jubilatorios a las AFJP. La privatización de las jubilaciones se financió con deuda pública. El matrimonio K celebraba estas realizaciones y las votaba en el Congreso con las dos manos. En 1994, una Convención Constituyente, con la presencia de Alfonsín, Carrió, Chacho Alvarez y Pino Solanas; legitimaba estos atropellos y creaba su correlato institucional - los decretos de necesidad y urgencia.
Con De la Rúa, la "alianza" radical- frepasista reconoció los fraudes menemistas y luego convocó a su mentor, Cavallo, a organizar un megacanje para refinanciar, o sea con nuevas deudas, la mayor fuga de capitales de la historia, siempre en beneficio de los Techint, Arcor, Pérez Companc y otros. En las vísperas de la cesación de pagos del 2001, la deuda -pública y privada-equivalía a todo el producto bruto nacional. Se estima que el patrimonio de un país tiene un valor equivalente al de su PBI.
En las vísperas del ‘corralito', Cavallo y Redrado sacaron un seguro para las reservas del país con un consorcio encabezado por el Deustche Bank, a cambio de una jugosa prima. Cuando se produjo el ‘default', ese consorcio se negó a pagar el seguro, con el total acuerdo de las autoridades argentinas; para ofrecer una justificación para la ruptura del contrato por parte de ese consorcio, el Congreso argentino vitoreó la declaración oficial de ‘default' anunciada por Rodríguez Saa.
La deuda tiene también su lugar para los "nacionales y populares", que respaldaron desde sus posiciones oficiales todas las estafas mencionadas. Luego, el "canje" del 2005, incluidos los ajustes por inflación, estableció un valor para los títulos del orden del 60-65 de su precio de emisión, cuando en el mercado se cotizaban a 10 centavos, o sea un 90% abajo. Como la miel, el canje de los K atrajo los ‘fondos buitres' a Argentina. Después de las quitas y el default, el "gobierno del desendeudamiento" registra una deuda pública de 145.000 millones de dólares, lo mismo que contabilizaba De la Rúa antes del default. Pero una cifra similar suman los "activos de argentinos en el exterior", o sea, la fuga de capitales. A través de la deuda y de la dilapidación del superávit comercial, el estado ha financiado esa fuga.
La lista de fraudes tiene lugar para uno más: el que están urdiendo Kirchner y Bodou con los bonistas que no aceptaron el canje del 2005. El valor de la oferta oficial por estos bonos podría superar en un 50% a la de 2005, puesto que reconoce los intereses acumulados por estos títulos en los tres años que pasaron, e incluso el "ajuste" por crecimiento del PBI. Los bonos que ahora se cambiarán al 52% de su valor nominal fueron comprados por sus actuales tenedores a un valor "chatarra" del 25%, luego de que Kirchner y Lavagna hicieran votar la "ley cerrojo que prohibía cualquier nuevo canje de deuda. De esta derogación salen beneficiados de nuevo los fondos buitres y los ‘capitalistas amigos' - los Kirchner, Ezquenazi, López o Werthein, que están al tanto de lo que se cuece arriba.

Una clase social en el banquillo
La responsabilidad política y penal por el fraude de la deuda se extiende desde los Videla-Martínez de Hoz a los Alfonsín, Menem, De la Rúa, Duhalde o Kirchner. Se los podría condenar a prisión y a la pérdida de sus derechos políticos. ¿Pero esto resolvería la hipoteca ilevantable que representa la deuda pública, originada en la deuda externa, que ahora, además, empapela, en un 40%, las cajas fuertes de la Anses, Pami, Banco Nación y Banco Central - a costa de los jubilados, los contribuyentes y el poder adquisitivo del salario? De ninguna manera, judicializar la deuda pública es una maniobra de distracción para seguir pagando con el consuelo de que sus responsables podrían ir presos, lo cual es improbable porque han pasado los plazos de prescripción. No hay deuda legítima e ilegítima; toda ella es ilegítima y usuraria. Tampoco se trata simplemente de no pagar, porque el ahorro que se obtendría en este caso iría a parar al bolsillo de los capitalistas o a fugar capitales. Es necesario poner el no pago de la deuda externa al servicio de un plan de transformación social del país, para lo cual es necesario el gobierno de los trabajadores.
Lo "ilegítimo" y "fraudulento" es el proceso político y social que prohijó la deuda, o sea el régimen democrático burgués, con sus jueces inamovibles, sus políticos corruptos y sus fuerzas de represión al servicio del sostenimiento de semejante orden. Pero los que, como Solanas, piden investigar la deuda no quieren que se investigue a ‘su' democracia, la que legitimó la deuda y votó regularmente su pago. No quiere poner en cuestión el régimen político - es puro verso electoral- mucho menos el régimen social. Un proceso de confiscación social masivo, como es la deuda externa, cuestiona los fundamentos de los regímenes que lo amparó. Por eso a finales de la década de 1820 puso fin al régimen rivadaviano; en 1890 provocó la Revolución del Parque; en 1982 acabó con la dictadura; en 1989-91 llevó a los asaltos a supermercados; y en 2001 al argentinazo. Los tribunales o una comisión del Congreso son una suerte de noria para un problema que exige una salida de conjunto.

Marcelo Ramal - Jorge Altamira

domingo, 24 de enero de 2010

26 de enero: Plan de Lucha Nacional

CONFERENCIA DE PRENSA
Lunes 25 a las 10hs.
En La Toma (Tucumán 1349)

El lunes a las 10hs. organizaciones piqueteras de la ciudad: Polo Obrero, Teresa Vive, Barrios de Pié, CCC, convocamos a una conferencia de prensa en La Toma con la finalidad de presentar las próximas medidas de lucha en el marco del Plan de Lucha Nacional del martes 26 de enero.
Desde el Polo Obrero impulsamos los siguientes reclamos:
1) Ingreso irrestricto con inscripción pública y transparente, con veedores de las organizaciones obreras y populares al programa Argentina Trabaja. Extensión inmediata del programa a todo el país.
2) Plan de obras públicas y viviendas populares sobre la base del no pago de la deuda externa y un impuesto extraordinario al gran capital.
3) Prohibición de despidos y suspensiones. Reparto de las horas de trabajo sin afectar el salario.
4) Subsidio universal al desocupado igual a la canasta de pobreza.
5) Asignaciones familiares universales financiadas por aportes patronales.
6) Pase a planta permanente de todos los que trabajan para el Estado cooperativizados, contratados o en otras modalidades precarias.

POLO OBRERO Rosario

jueves, 21 de enero de 2010

El Pacto de Olivos de los Kirchner

O cuidado con las segundas partes

La Presidenta va a realizar su sueño (¿de piba?), que es repetir la historia como una farsa. La opinión pública lo intuyó cuando calificó a la crisis política del verano del bicentenario como “un culebrón”. Es que todos, oficialistas y opositores, coinciden en que hay que seguir pagando la deuda usuraria, y la mayoría de ellos está de acuerdo en hacerlo con un crédito de las reservas del Banco Central. Las páginas de Ámbito Financiero abundan con opiniones favorables por parte de consultores de grandes empresas y capitales. Lo reclaman los banqueros, los capitalistas, las entidades empresarias. El Fondo del Bicentenario lo inventó un agente de la banca internacional y candidato ‘in pectore’ del kirchnerismo, Mario Blejer, con dos décadas a cuestas como funcionario del FMI. Argentina ha retrocedido a tal extremo que, nuestros nacionales y populares no encuentran otras fuentes de inspiración. Ni siquiera Redrado se opone al manotazo, sólo pide que lo apruebe el Congreso y que en lugar de transferirlo al Tesoro el fondo se quede en el Central como garantía del pago de la deuda.
En torno a estas presiones se ha ido armando un acuerdo entre los K y la UCR, cuyo antecedente más próximo es el que alcanzaron por la reforma política proscriptiva. Los radicales están dispuestos a convalidar los decretos de necesidad y urgencia en el Congreso. Un lobbista de la Asociación de Bancos, Christian Colombo, oficia de enlace con la UCR en su condición de radical y ex mandamás en el gobierno de De la Rúa, para que salga el fondo bicentenario. Pero los K no pueden quedar agarrados de la UCR, si no obtienen la salida de Cobos. Por eso la Presidenta realizó el martes pasado una maniobra a dos puntas: por un lado, convocó a la bicameral que asesora sobre decretos de necesidad y urgencia, y decidió, por el otro, meter presión para que se vaya Cobos con el anuncio de que no viaja a China para no transferirle el mando. Todo indica que la bicameral (¡presidida por Cobos!) está dispuesta a convalidar el decreto contra Redrado, pero no sin antes citar a Redrado para que haga su descargo. Así, el culebrón continúa. Lo que queda por verse es si los K están dispuestos a ir a fondo en la apretada a la UCR, como sería convocar a un plebiscito para decidir si Cobos debe seguir en la vice-presidencia, esto en el caso que la comisión bicameral rechace el decreto que destituyó a Redrado, o que dé largas al asunto. Los K reclamarían, en la variante del plebiscito, que Macri, Carrió y una parte de la UCR apoye la salida de Cobos, como lo vienen haciendo en las declaraciones. Como se ve, la tentativa de armar un nuevo pacto de Olivos, recurriendo a la misma amenaza que utilizó Menem contra Alfonsín, o sea convocar a un plebiscito, podría acabar en un desastre. Es instructiva, por otro lado, que la Presidenta prefiera poner a examen, ante la bicameral, el decreto que echa a Redrado y no el que crea el Fondo del endeudamiento (no desendeudamiento), o sea que ya ha llegado a un acuerdo para cambiar algunos de sus términos (lo cual lo hace caduco).
El centroizquierdismo balconea la crisis desde afuera, refugiado en la consigna de que el Congreso forme una comisión para investigar la deuda externa. La UCR y Carrió respondieron que sí, y hasta el marido de la Presidenta desautorizó a su esposa coqueteando con una aprobación. Tendríamos en este caso la solución Perón: cajonear un reclamo formando comisiones. Los líderes de Proyecto Sur no asistieron a la conferencia de prensa que anunció una marcha para el vienes por el no pago de la deuda. O sea que le hurtan el bulto. ¿Qué conclusión sacarán los izquierdistas que se empeñaron en organizar la marcha por la expectativa de una presencia estelar de Solanas? Sea como fuere, Proyecto Sur continúa su trabajo de armar un frente con Binner, Juez e incluso Stolbizer –tres inconmovibles partidarios de pagar la usura. La transparencia del binomio Solanas-Lozano deja que desear. En la Convención Constituyente de 1994 Solanas votó la cláusula del Pacto de Olivos que estableció los decretos de necesidad y urgencia, sin condicionarlos a ninguna investigación de la deuda.
Las noticias del miércoles, dando cuenta de un déficit fiscal en 2009, que sería de 40 mil millones de pesos si se le descuentan los aportes de la Anses y las ganancias del Banco Central y se le suman los déficits de las provincias, demuestran que los K no tienen recursos para pagar la deuda externa sin recurrir a nuevas deudas, o sea a someterse a los mercados internacionales. Es lo que se llama una situación de cesación de pagos. El mismo panorama aparece si dejamos el Presupuesto y vamos al balance del Banco Central, esto porque sus reservas netas serían negativas si se computan los préstamos contraídos con la banca local y con el Banco de Basilea. Es cierto que los pronósticos hablan de un superávit comercial, para 2010, de 15 mil millones de dólares, lo mismo que hay que pagar por capital e intereses de la deuda pública. Pero la crisis fiscal que se extiende en Europa (Islandia acaba de aprobar la realización de un referendo para no pagar su deuda, que será ganado en forma abrumadora) hace prever una salida de capitales de los países emergentes. De lo que se concluye que no se sale de la crisis haciendo números sino poniendo fin a las condiciones sociales que han llevado a este derrumbe. Que Argentina haya entrado en la enésima crisis de la deuda y en una crisis política más del régimen construido para pagarla, es la prueba irrefutable de que la sociedad ha entrado en una contradicción irremediable con las condiciones existentes. Se trata de sacar las conclusiones políticas de esta evidencia.
Jorge Altamira

YPF está en remate

En julio del año pasado, Luis Oviedo señalaba: “La crisis de la estructura accionaria convierte a YPF en una empresa en remate. Sus principales accionistas –Sacyr, Caixa, Petersen– han ingresado a su controlante, Repsol, contrayendo deuda que tiene como garantía las acciones, sea de Repsol o de YPF. Carecen, por lo tanto, de cualquier capacidad para realizar inversiones en exploración o ampliación de la producción. Para pagar la deuda están obligados a recibir dividendos en lugar de reinvertir las ganancias. En otras palabras, están condenados a descapitalizar sistemáticamente a YPF... para capitalizar a sus bancos y constructoras accionistas” (PO Nº 1.090, 9/7/09).
El tiempo le ha dado la razón a esta caracterización y pronóstico. La crisis económica más general comprimió las ganancias de Repsol y de YPF en 2009 a la mitad, pero la distribución de dividendos en Repsol fue sólo un 20% menor a la de 2008 y en YPF se mantuvo igual. El resultado fue que el 85% de las ganancias de Repsol fueron a parar a sus accionistas, mientras que en YPF alcanzaron el 90%. YPF aporta entre el 25 y el 30% de las ganancias de Repsol.Este saqueo de la petrolera de ‘bandera’ no conformó a los asfixiados accionistas, que exigen mayores dividendos e ingresos extraordinarios generados con la venta de YPF y, eventualmente, el desguace de Repsol. Como nada de eso sucedió, Sacyr y Caixa han resuelto despedir a la dirección de Repsol, aunque por el momento Caixa haya ratificado a Brufan, el presidente del pulpo.
Desde un principio, la “argentinización” de YPF ha estado al servicio de profundizar la depredación de la petrolera en favor de sus accionistas, los que redujeron las inversiones en la Argentina al mínimo mientras incrementaron al máximo el reparto de dividendos. Así lograron las tremendas ganancias de 2008 y los resultados relativamente buenos de 2009. Para eso entraron los Eskenazi (dueños de Petersen) a YPF: para darle viabilidad política al vaciamiento de YPF, del que los Kirchner son cómplices por su enmarañada sociedad con Eskenazi.
La falta de inversiones petroleras de YPF sacude a la Patagonia desde hace dos años, porque se tradujo en la reducción de los equipos de perforación, de trabajos de sísmica y de todo tipo de contrataciones.
Si hasta ahora Repsol no ha logrado ser vendida es porque su cotización en Bolsa está por debajo de lo que Sacyr pagó para entrar en ella. Y porque Caixa quiere limitar la capacidad de control del comprador, de forma tal que no interfiera en el manejo de Gas Natural (que en la Argentina controla Gas Natural BAN), cuyas acciones comparten Caixa y Repsol.
Del mismo modo, la sobrevaloración de YPF ha impedido hasta ahora su venta a los chinos, rusos u otros interesados, incluso a algún capitalista amigo del gobierno. Ahora se habla de que el kirchnerismo podría comprar la parte de Repsol con las reservas.
Como fuere, la “argentinización” va derecho al remate y, antes de que suceda, Petersen quiere valorizar su parte todo lo posible. Para ello ha contado con el favor del arco político criollo, desde Cristina hasta los presidenciables opositores Binner y Das Neves, quienes prestaron el cuerpo para acompañar una presentación recontratrucha, el 23 de diciembre, en la que YPF prometió inversiones de exploración a lo largo y ancho del territorio nacional, incluyendo el mar, planteando hacerse cargo de todas las áreas petroleras no exploradas, incluso de las concesionadas a otros privados. Es decir, la YPF privada prometió hacer lo que corresponde que haga el Estado a través de Enarsa, que ha demostrado ser nada más que una cáscara vacía incapaz de licitar las áreas de exploración marinas y que se ha transformado en una comercializadora de combustibles a pérdida.
El solo anuncio del plan obliga a preguntarse de dónde saldrá el dinero para financiarlo, en muchos casos a fondo perdido. Pero, además, pretende colocar a YPF, con el aval de todo el arco político burgués (lo que se dice una verdadera ‘política de Estado’) en el papel de árbitro del negocio petrolero nacional. Setentistas y noventistas, nueva y vieja política, todos se agruparon detrás de un rentista nacional para demostrar que Petersen es reconocido por el Estado como el lobbysta petrolero de moda, a través del cual pasarán los negocios petroleros con el Estado argentino.
Paul Castañeda
Kirchner y Solanas, unidos en el rescate a Repsol

En el contrato de compra del 15% de las acciones de YPF por parte de Petersen –y que fue aprobado por Néstor y Cristina, porque el Estado argentino tiene derecho de veto en YPF– se estipula que, durante 10 años, el 90% de las ganancias que produzca la petrolera de ‘bandera' irán al pago de dividendos, que se distribuyen entre los dos socios y que Petersen emplea para saldar el préstamo que Repsol le concedió para comprar... YPF.
YPF no va a poder resistir ese ritmo de vaciamiento, más cuando los accionistas principales, por su propia crisis, reclaman estrujarla más y más. Es decir, el vaciamiento está al servicio del rescate de los endeudados españoles.
Y aquí aparecen los nacionales y populares confesando que carecen de soluciones. Por caso, Carlos Heller, el banquero nac & pop, para quien la compra de YPF es imposible, porque "Argentina (no) cuenta con los recursos suficientes" (Crítica, 26/12/09).
Otro es Pino Solanas, quien consultado sobre la posibilidad de estatizar YPF, contestó: "Estatizar YPF puede ser una variante, pero hay que estudiar las complicaciones y sacar la cuenta. Ver si es más barata la compra o empezar de cero con una nueva (empresa)" (El Cronista, 15/12/09). ¿Empezar de cero en competencia con Repsol, Panamerican, Petrobras, etc. –¡sale más caro que comprarla!?
El vaciamiento petrolero no se puede esquivar sin la nacionalización sin pago de Repsol-YPF. Lo demás son divagaciones de políticos en calzoncillos.
P.C.

Una nueva ocupación militar de Haití

El mundo asiste, de nuevo, a una gigantesca exhibición de lágrimas de cocodrilo ante una formidable tragedia humana, cuyas raíces sociales y políticas la clase capitalista dominante se empeña en ocultar. Lo hace con tanta mayor intensidad cuanto que ahora está embarcada en disimular la explotación política de la tragedia, con vistas a acentuar su despliegue militar en la isla y más allá de ella.
Lo ocurrido es lo más cercano a una tragedia anunciada, y no solamente porque el sismo era previsible. Otros fenómenos, los huracanes, ya habían dejado a su paso un tendal de destrucción y de muerte que no se verificaron en otros países afectados por circunstancias similares – como el que ocurrió el año pasado en Cuba, con una destrucción económica sin precedentes, pero apenas cuatro muertos. O sea que las condiciones y estructuras sociales de Haití se prestaban para una tragedia humana, y que nada hicieron para remediarlas ni los gobiernos digitados por la ONU desde hace década y media ni la fuerza militar que ocupa la isla desde hace cinco años bajo el comando de Brasil ni la presencia de Argentina y de varios países latinoamericanos (aunque también de otros, como Corea del Sur o China). “Los terremotos de magnitud 7.0 –dice un especialista (Financial Times, 14/1)–, no son inusuales; se produjeron 17 durante 2009. Pero muy pocos han tenido consecuencias terribles semejantes”. Es cierto que el terremoto fue tan desvastador, opina otro científico, debido a que su fuente fue una profundidad vacía de cerca de diez kilómetros... muy cercana a la superficie”. Pero “Esta falla ha estado alojada durante los últimos 250 años, acumulando una presión gradual que ahora fue liberada en un solo terremoto de amplitud”. Todas estas previsiones no sirvieron para brindar al territorio latinoamericano que más ocupaciones militares sufriera durante doscientos años, por parte de las naciones avanzadas, ninguna de las protecciones urbanas y sociales que habrían sido necesarias. Lo peor aún está por llegar: “habrá nuevos estallidos durante varias semanas”, dice otro experto, así como “grandes posibilidades de deslizamientos de tierras, que podrán causar daños en otras partes de la isla”.
¡Haití es la nación con más ONGs per cápita del mundo! –revela, en The New York Times, un comentarista (David Brooks) afiliado al centroderecha internacional (La Nación, 18/1). Con sus estructuras sociales y estatales destruidas por una injerencia imperialista incesante, “la espantosa situación del país más pobre y disfuncional de las Américas ya lo había transformado en el destino prioritario para todo tipo de organizaciones no gubernamentales”, agrega otro de los analistas de la misma especie (Moisés Naim). Semejante desmantelamiento político hace inviable la distribución más elemental de la ayuda humanitaria, que se apila mientras tanto en los depósitos a la espera de que el ejército norteamericano vuelva a ocupar por enésima vez Haití. La corresponsal de Clarín (18/1) constató: “La cifras hablan por sí solas: apenas se rescataron 70 personas con vida desde el terremoto cuando las víctimas se cuentan por decenas de miles”. ¿Qué estuvieron haciendo, entonces, en estos cinco años, los ejércitos de Chile, Brasil, Uruguay, Argentina, Colombia, Perú que fueron encargados por la ONU para mantener el orden colonial del país, convalidar el derrocamiento de gobiernos electos y ejercer la represión interna que muchos de ellos tienen constitucionalmente prohibido en su países? Los ya dos mentados comentaristas del ‘establishment’ internacional han dejado por escrito el testimonio de la relación que existe entre la destrucción de la autonomía nacional de los países atrasados y la proliferación de ONGs, cuya función es ejecutar los planes de las asociaciones capitalistas que las financian.
Esta descripción de la situación haitiana permite entender el carácter de la intervención norteamericana, que podría llegar a 20 mil soldados y sumar el ingreso de contratistas militares privados (Blackwater) –algo que está muy cerca de la cifra del aumento reciente de tropas en Afganistán. La prioridad de Obama no es la asistencia humanitaria sino la prevención de un levantamiento popular o, en su defecto, una huida en masa de la población hacia Santo Domingo o las costas norteamericanas. Finalmente, no hay que olvidar que la mayoría de los haitianos reclama el retorno del presidente Bertrand Arístide, derrocado por el gobierno de Clinton. En momentos en que la situación humanitaria es absolutamente dramática, el gobierno norteamericano no ha habilitado la atención médica de los casos más desesperantes en su suelo.
¡Los progres de Estados Unidos le reclaman que no continúe deportando a los haitianos indocumentados! Pero la ocupación militar norteamericana no dejará de provocar crisis con los países de la fuerza de ocupación ya instalada desde hace cinco años. Esta fuerza, con los gauchos K a la cabeza, va a la desintegración; Sarkozy ya entró en choque con Obama. Si volvieran a producirse terremotos, según las previsiones (esta mañana hubo otro), las tropas norteamericanas podrían verse enfrentadas directamente con la masa de la población haitiana. Nunca hay que olvidar que el pueblo de Haití derrotó, a principios del siglo XIX, a las dos mayores flotas de la época – la de Napoleón y la británica.
¿Qué podemos hacer desde el punto de vista de los trabajadores?
Puesto que los ejércitos que ocupan Haití se encuentran allí para reprimir y no para ayudar, debemos reclamar que se vayan y que el dinero malgastado en ellos se aplique a la ayuda humanitaria. ¡Fuera la Minutash, fuera el Pentágono!
Que Cuba, Santo Domingo y Estados Unidos acojan para su tratamiento a todos los casos que reclaman urgencia y un tratamiento del que no se dispone en Haití. Los movimientos pacifistas norteamericanos podrían hacer una gran movilización nacional.
Que las centrales sindicales y los partidos de izquierda de América Latina formen comisiones de control de la ayuda y de su aplicación, junto a las organizaciones populares haitianas.Que se emplee en las tareas de reconstrucción a los desocupados de Haití a cambio de un salario mínimo igual al costo de la canasta familiar.
J.A.

Bolivia: Empieza a despuntar una nueva etapa política

Más de 6 mil fabriles se movilizaron el viernes 15 en La Paz contra la flexibilización laboral y los contratos basura impuestos por el gobierno. Evo Morales quedó esta vez en el centro de las críticas de los trabajadores. Una semana antes, el 8, miles de partidarios del MAS se manifestaron en contra de la decisión gubernamental de poner a conocidos derechistas entre sus candidatos a prefectos, alcaldes y asambleístas departamentales en las elecciones del 4 de abril.
La protesta del 8, en Santa Cruz, bloqueó el ingreso del hotel donde Morales, a las 10 de la mañana, se proponía proclamar la candidatura, en las listas del MAS, del derechista Roberto Fernández (ex dirigente de Podemos, el partido de Jorge "Tuto" Quiroga). La proclamación, finalmente, se hizo en medio de incidentes, forcejeos y trompadas. Un escándalo.
Esto es: cuando parecía acerrojado para toda una época el control del presidente sobre el proceso político y especialmente sobre las masas bolivianas, todo el esquema empieza a entrar en una crisis abrupta. En materia de estabilidad política, los tiempos bolivianos suelen ser cortos.
Y es mucho más lo que entra en crisis con esas candidaturas de derecha impulsadas por el MAS. Tambalea toda la idea expuesta recientemente, en una entrevista televisiva, por el vicepresidente Alvaro García Linera: "El MAS no es lo que era, ahora se han incorporado empresarios, intelectuales, independientes... hay otra economía en Bolivia". Esa "otra economía" se manifiesta, por ejemplo, en el Decreto Supremo 107, dictado por el gobierno, que impone la "tercerización" y el trabajo precario en las empresas estatales. Contra ese decreto se movilizaron masivamente los fabriles de La Paz.
No fueron los únicos. El jueves 7 se declararon en huelga indefinida los trabajadores del Hospital Holandés, en El Alto, por falta de insumos. También peligra el comienzo de las clases porque el incremento salarial del 14 por ciento prometido a los docentes se ha reducido al 4.
Montado sobre la movilización popular, Evo Morales derrotó a la derecha sublevada en 2008. Luego, hizo que esa movilización retrocediera para llegar a un pacto con aquella derecha vencida o, mejor dicho, con los intereses representados por ella. Los derechistas recalcitrantes terminan presos, destituidos, clandestinos o escapados del país, como el ex candidato presidencial Manfred Reyes Villa y otros cuantos con él, sin que la "media luna" deje oír protestas por eso.
Ahora, recostado en la derecha, el "capitalismo andino" se encuentra con el despuntar de una movilización popular que parte de las propias bases del MAS. Empieza a abrirse una nueva etapa política.

Miguel Osuna

lunes, 18 de enero de 2010

No al pago de la deuda externa

Ni con decretos ni con leyes
Por la nacionalizacion de la banca y un banco central e instituciones al servicio de la liberacion nacional y social

[Propuesta de declaración presentada por la delegación del Partido Obrero a una reunión de partidos y organizaciones de centroizquierda y de izquierda con motivo de la crisis suscitada por los decretos de necesidad y urgencia que crean el Fondo del Bicentenario y destituyen al presidente del BCRA]

Después de 40 años de tributos coloniales a los acreedores financieros internacionales y nacionales, la deuda externa vuelve a desatar una crisis política, como lo hiciera decena de veces en todo este período. Estamos ante la prueba más palpable de que se trata de una hipoteca usuraria, incompatible con el desarrollo nacional e incluso con el régimen político creado a su servicio.
En esta ocasión estamos ante un decreto de necesidad y urgencia dictado por un gobierno que tiene pretensiones de ‘nacional y popular'. Apunta, de este modo, a enfrentar la crisis capitalista mundial por medio de un manotazo a las reservas en divisas del país a cambio de una letra de un Tesoro en cesación de pagos. Apunta, asimismo, a armar un ‘canje' con los ‘fondos buitres' que no aceptaron la renegociación de 2005 y con los usureros del Club de París. La finalidad de todo este paquete es rescatar a la burguesía nativa por medio un mayor endeudamiento con las finanzas internacionales.
Este mismo gobierno ‘nacional y popular' ha cancelado por anticipado la deuda con el FMI y ha hipotecado los recursos de la Anses, al Pami, de las empresas descentralizadas y al Banco Central por el equivalente al 40% del total de la deuda, para saldar las cuentas con los usureros del país y del exterior.
Argentina ingresa al Bicentenario con un acto de completa sumisión nacional.
Frente a este propósito ‘nacional y popular' se ha levantado una oposición que reclama que se siga pagando la deuda usuraria; que se prosiga con el ‘canje' con los ‘fondos buitres'; que se ‘vuelva a los mercados internacionales'; pero no con una letra al Banco Central sino con un plan de ajuste y de tarifazos que recupere el ‘superávit fiscal' necesario para ese pago.
Esta oposición al Fondo del Bicentenario es impulsada por un amplio sector del capital financiero internacional, con el FMI a la cabeza, que quiere guardar las reservas para garantizar una nueva fuga de capitales como la que tuvo lugar desde 2007 y que se llevó fuera del país unos 40 mil millones de dólares.
Esta posición entreguista y antinacional cuenta con el apoyo de la inmensa mayoría de los partidos de la oposición parlamentaria. Se trata de un choque entre dos modalidades de la entrega nacional, azuzada por la bancarrota capitalista mundial.
Expresamos nuestro repudio al entreguismo oficial y al entreguismo opositor.
Esta oposición entreguista defiende una independencia del Banco Central, que es la consigna de los usureros internacionales, a sabiendas de que los bancos centrales ‘independientes' son sucursales y marionetas de los monopolios bancarios internacionales - como lo demuestra la historia de la banca central en Argentina y América Latina, y como lo demuestra el rescate billonario de la banca central de Estados Unidos, Europa y Japón a los banqueros que han provocado la presente crisis mundial.
Denunciamos las gestiones en marcha entre oficialistas y opositores para sacar adelante una versión modificada del Fondo del Bicentenario y otorgar una cobertura legislativa a los decretos de necesidad y urgencia.
En oposición a la independencia que reclama la usura internacional y la gran mayoría de los partidos en el Congreso, reivindicamos que el Banco Central debe estar bajo la gestión y el control de los trabajadores. Nos pronunciamos por la nacionalización de la banca (e investigación de los desfalcos cometidos contra el país) y una banca única al servicio de los intereses nacionales.
Las organizaciones, movimientos y partidos políticos que firmamos la presente declaración nos pronunciamos por el cese definitivo del pago de la deuda usuraria, la denunciamos como antinacional e ilegítima y reclamamos el castigo para quienes la contrajeron y renegociaron en los últimos cuarenta años - desde la dictadura militar; el reconocimiento de su estatización a partir de 1983; su canje por el patrimonio estatal bajo el menemato; los ‘blindajes' del gobierno de la Alianza-Cavallo; la devaluación de 2002; y la renegociación con ajuste por inflación de 2005.
Reivindicamos las investigaciones realizadas por el juez Ballesteros, que comprobaron sin lugar a dudas la ilegitimidad de la deuda pública, y que se enjuicie y castigue a los responsables de ese fraude.
Repudiamos el método de gobernar con decretos de necesidad y urgencia o el veto parcial de las leyes, y asimismo nos pronunciamos contra cualquier tentativa de golpismo bajo ropaje parlamentario - como ha ocurrido y se está tramando en otros países de América Latina.
Es la hora de romper la falsa polarización entre grupos e intereses de la clase dominante y es la hora de que irrumpan las masas populares como un protagonista independiente al servicio de la independencia nacional y del progreso material y moral del pueblo que vive de su trabajo.
13 de enero de 2009

viernes, 15 de enero de 2010

Con los tarifazos el gobierno binnerista toca fondo

El Partido Obrero rechaza el aumento de las tarifas de luz y agua del gobierno binnerista. El aumento – que según Ciancio sería un primer escalón - ni siquiera prevé un plan de inversión, de extensión de los servicios o reparación de las instalaciones que dejan continuamente a los santafesinos sin luz.
La suba de las tarifas se suma al impuestazo del inmobiliario y de las patentes y al prometido aumento del transporte. Pero mientras la canasta familiar y el costo de vida siguen subiendo los sueldos siguen congelados, la desocupación y la pobreza aumentan día a día.
El binnerismo como el PJ (K y disidente), están comprometidos en hacernos pagar la crisis. Un gobierno que intenta sobrevivir a costa de meter sistemáticamente la mano en los bolsillos de los trabajadores es un gobierno que toca fondo.
Debemos organizarnos para luchar contra los tarifazos. Que los recursos provinciales salgan de un impuesto progresivo a las grandes empresas y grupos agro-exportadores que se han beneficiado con subsidios y exenciones impositivas y han amasado monstruosas ganancias en base a la superexplotación obrera y a la destrucción del medio-ambiente. Actualización inmediata de los valores impositivos de los campos de los grandes propietarios rurales, con el aumento de la alícuota.
PARTIDO OBRERO Santa Fe

domingo, 10 de enero de 2010

Denuncia del PO

“COBOS, REDRADO Y LOS K ESTAN NEGOCIANDO EL PAGO DE LA DEUDA EXTERNA CON RESERVAS DEL BANCO CENTRAL A CAMBIO DE UNA INTERVENCION DEL CONGRESO”
Los K, los Redrado y los Cobos nunca han discrepado sobre la continuación del pago de la deuda externa, ni tampoco sobre el uso de las reservas del Banco Central, que es la única forma de hacer efectivo el pago. Desde mediados de 2007, los K y Redrado autorizaron la dilapidación de 40 mil millones de dólares de esas reservas para financiar una fuga de capitales, con la complicidad y la complacencia de Cobos y del Congreso. De la misma manera, el Congreso y Cobos votaron el levantamiento de la prohibición de volver a renegociar con los bonistas que no aceptaron el acuerdo de 2005 -y con el Club de París- para impulsar un nuevo ciclo de endeudamiento (no de ‘desendeudamiento’, como dicen los K). La garantía de este acuerdo la dará el nombramiento consensuado al frente el BCRA de Mario Blejer, hombre de la banca internacional.
La discrepancia se produce ahora con referencia a si ese pago puede hacerse o no por medio de decretos de necesidad y urgencia. O sea que el acuerdo en sacarle de nuevo los dólares al Banco Central a cambio de una Letra del Tesoro ya existe; la diferencia es la modalidad, es decir que estamos ante una diputa de poder entre los K y la oposición parlamentaria. La Asociación de Bancos ha defendido abiertamente ese pago. La suma que reclaman los K coincide con la deuda con el Club de París, aunque como todo usurero el Club de París prefiere que no sea cancelada sino refinanciada – incluso con la intervención del FMI. Ni los Cobos o Redrados, ni los Kirchner quieren torpedear los negocios de la banca con la deuda externa, como podría ocurrir si se prolonga la crisis. En función de la defensa de esos intereses, están negociando una salida para que los DNU pasen la prueba del Congreso y entren en vigencia. La caída en la cotización de los bonos argentinos –que fue el gran negociado del semestre– le pone urgencia al acuerdo, porque implica pérdidas para los bancos y los especuladores del exterior.
La lección es clara: para detener el saqueo del país es necesaria una alternativa independiente a los bloques políticos capitalistas.
Jorge Altamira
Néstor Pitrola
Marcelo Ramal

jueves, 7 de enero de 2010

Altamira ante el decreto de necesidad y urgencia que destituye e inicia acción penal al Presidente del Banco Central

LA CULPA NO ES DEL CHANCHO

La Presidenta ha decidido cargarse con las reservas del Banco Central y con su presidente, apelando al monstruo de los decretos de necesidad y urgencia creado por peronistas, radicales, socialistas y frepasistas en la Constituyente de 1994. La discusión sobre la constitucionalidad de estos atropellos es una cortina de humo, porque ese tipo de decretos es, en sí mismo, incompatible con un régimen constitucional. Los que hoy reclaman ‘calidad institucional’ son tan responsables del golpe del Ejecutivo como el matrimonio K. No en vano este régimen especial de decreto fue inventado por la dictadura militar brasileña instaurada en 1964, cuando se adornó a sí misma con un parlamento digitado. Ahora la cuestión es puramente política.
La destitución de Redrado es un recurso extremo para poner en vigencia, hasta 2011, un régimen que gobierna por decreto y veto. Es una extorsión a la banca internacional para que acepte a los K como el único interlocutor dispuesto a pagar en regla la deuda pública, canjear la que está en default y reiniciar un ciclo de nuevo endeudamiento. Redrado ha recibido el apoyo de los presidentes de los bancos centrales de Brasil y de la UE, y de los directores del Banco de Ajustes de Basilea.
Si el Congreso acepta el ultimátum, habrá sellado su impotencia por el resto del mandato. Pero el Congreso, que hoy está piloteado por Cobos, hará lo que decida la banca internacional. La oposición votó el Presupuesto 2010 que asigna los recursos para el pago de la deuda externa. Si hace un llamado a rechazar la destitución de Redrado por medio de un cacerolazo, habrá iniciado una acción golpista en función de los intereses capitalistas que representa. Luis Juez, un ex K del palo de Alberto Fernández, ya pidió el juicio político a la Presidenta.
La posición del Partido Obrero es rechazar el régimen de decretos de necesidad de urgencia y de vetos; rechazar el pago de la deuda externa, sea con fondos del Banco Central o con fondos presupuestados (impuestos, Pami, Anses); repudiar cualquier tentativa golpista de la oposición parlamentaria y llamar a los trabajadores a manifestarse en forma independiente por este programa.

LOS K EMPIEZAN EL BICENTENARIO PAGANDO DEUDA EXTERNA

Usted sabía que los K han pagado deuda externa endeudándose con la Anses por más de 20 mil millones de dólares? ¿Usted sabía que han hecho lo mismo con el Banco Central, por otros 30 mil millones?
Los ‘nacionalistas’ K han cancelado la mitad de la deuda externa argentina, en beneficio de la usura internacional, a cambio de una hipoteca contra los jubilados y los contribuyentes, que deberán pagar con mayores impuestos, menores gastos sociales y salariales o directamente con inflación.
Para hacer todo esto contaron con la complicidad de los Redrado, del Banco Central.Ahora se pelean porque la situación llegó a un límite, porque las reservas se encuentran hipotecadas.
Los K confían en que volverán a crecer, gracias al comercio exterior; los Redrado temen una nueva fuga de capitales, porque saben que la crisis mundial es más grave que nunca.
Los K quieren seguir endeudando al Estado con el Banco Central para pagar a los usureros; los Redrado reclaman que lo hagan con el dinero de los contribuyentes.
Ni a los K ni a los Redrado se les ocurre investigar la legitimidad de la deuda, ni tocar los intereses de los usureros y de los banqueros.
Argentina ingresa en una nueva crisis política como consecuencia del enfrentamiento entre intereses capitalistas rivales.
Estamos ante una nueva muestra del callejón sin salida de este régimen social y de sus representantes políticos.
Organicémonos para imponer, mediante la movilización colectiva, una alternativa socialista de la clase obrera y los trabajadores.

ARECO: "el campo" nos inunda a todos

San Antonio de Areco se inundó por el desborde del río. Esto fue provocado por la voracidad capitalista con la complicidad del gobierno. El Partido Obrero anticipó este desastre. Denunciamos la contaminación del agua por agroquímicos, los peligros de la siembra directa dado que le quita absorción al suelo, la utilización de la red de agua local para riego con la complicidad de las autoridades y el riesgo de la apertura de canales de desagüe de estas zonas que llevan su caudal al río. Sin embargo, aunque los hay clandestinos, varios de estos canales fueron aprobados por los sucesivos gobiernos. La intendente Lennon (de Concertación Vecinalista, integrante de la Coalición Cívica) convocó a movilizar a favor de la Mesa de Enlace en la discusión por la 125. Intervino ante el Ministerio del Interior a favor de un chacarero de la zona (Pasagulia) implicado en la quema de pastizales. Cuando se aprobó una ordenanza por unanimidad, impulsada por la agrupación ecologista Grupo Ambiente, que daba un tiempo determinado para la erradicación de grandes silos y depósitos de agroquímicos ya que se han comprobado muchos casos de cáncer en los alrededores, la vetó a instancias de los chacareros de Arpa. Ahora restó importancia a las acusaciones por la construcción de los canales y atribuyó el desastre a una “multicausalidad”, con un toque de cinismo al “acusar” de la inundación a las acacias negras. La complicidad del gobierno nacional y provincial es tan grande que cuando Moreno sobrevolaba los campos en búsqueda de silobolsas con soja, “no vio” los canales de desagüe.
Los ruralistas tienen sus campos secos y sus cosechas intactas, pero esto no los detiene para solicitar rebajas impositivas y subsidios. Por el contrario, el Partido Obrero de San Antonio de Areco plantea:
• Urgente relevamiento de lo perdido por los habitantes afectados por la inundación.
• Materiales y subsidios para refaccionar viviendas. Plan de viviendas en tierras altas para los vecinos afectados. Alquileres a cargo del Estado para los inquilinos inundados y los que tengan que alquilar por la inundación.
• Desagües de los barrios, agua potable, cloacas y urbanización a cargo del Estado. Limpieza de la vera del río.
• Plan de prevención de enfermedades y alimentación adecuada. Recuperación para el pueblo del ex Hospital Morgan, que hoy ocupa la Iglesia.
• Anulación de los canales clandestinos. Multas, juicio y castigo a los ruralistas responsables.
• Impuesto progresivo a las grandesfortunas. Inmobiliario rural acorde al valor de la hectárea. • Asambleas populares para impulsar este programa y controlar las obras.

Partido Obrero de San Antonio de Areco

En el medio de una crisis que se profundiza

Resolución del Secretariado Internacional de la CRCI
La bancarrota capitalista mundial
La crisis capitalista mundial, reconocida universalmente como la peor de la historia, no ha terminado; estamos frente al meollo de su desarrollo. Al final de 2009, el espectro de los defaults soberanos desde Dubai y Grecia hasta Irlanda sacudió al conjunto de la Eurozona y la Unión Europea y reveló el impacto catastrófico de las montañas de deudas de los Estados capitalistas en todo el planeta, empezando por los propios Estados Unidos, desmintiendo las tempranas afirmaciones de recuperación.
La inyección de una masa de liquidez sin precedentes de parte de los gobiernos y bancos centrales -en particular después del pánico causado en 2008-2009 por la debacle de Lehman Brothers- con la intención de salvar al sistema financiero internacional en colapso fue una maniobra de contención; han dilatado la precipitación de la caída temporalmente, sin resolver las contradicciones sistémicas que explotaron en la crisis. Estas contradicciones fueron más bien exacerbadas y se produjeron nuevos problemas.
Más allá de la retórica, no hay recuperación de puestos de trabajo sino crecimiento de la desocupación; no hay recuperación sino constreñimiento del crédito inmobiliario y para pequeñas empresas; no hay recuperación del gasto en consumo sino sub-consumo; no se des-palanquean los bancos sobre-expuestos y sub-capitalizados. El océano de derivativos no ha retrocedido más que apenas. Su función, de todas maneras, es vital para el capitalismo contemporáneo y no puede ser abolida sin precipitar el colapso del sistema entero. Nuevas burbujas enormes de capital financiero se han formado cuando la liquidez disponible fue dirigida masivamente, una vez más, a actividades especulativas. Particularmente, el "carry trade" (inversiones financieras en países con altas tasas de interés que son financiadas por préstamos en otros países a baja tasas de interés) basado en el debilitamiento del dólar alimentó la especulación, mientras desvirtuó los efectos del paquete de estímulos y redirigió el flujo de dinero hacia fuera de los Estados Unidos. Los mercados financieros despegan, aunque en la esfera de la producción dominan la capacidad ociosa y una crisis de sobre-acumulación de capital, abriendo más aún las tijeras entre el capital ficticio y el productivo. Las burbujas en algún momento, más antes que después, deben reventar produciendo una recesión de doble caída.
La intervención estatal (mediante la puesta a disposición de cantidades abundantes de efectivo deliberadamente) estimula la especulación para salvar al capital financiero -dominante en nuestra época imperialista de decadencia capitalista- del colapso. Pero de esta manera, la misma deuda pública crece exponencialmente, sin tener una base sustentable en la esfera de producción de valor. Los bonos soberanos para financiar deudas y déficits públicos han ocupado el espacio que hasta recientemente tenía el mercado de hipotecas sub-prime que, con su colapso inescapable, disparó esta crisis. Comentando el caso de Grecia, directivos de grandes bancos occidentales prevén que "después de dos años de preocuparnos por los riesgos de las hipotecas y las corporaciones, el riesgo soberano va a ser el gran debate para el 2010 -tanto para los bancos, como para la comunidad inversora más extendida" (Financial Times, 21/12/09).
Tanto los países metropolitanos como periféricos son afectados por la quiebra de la globalización financiera. El centro del sistema mundial y, por ende, de la crisis está en Estados Unidos, el país más poderoso y sobre-endeudado del mundo, que trata de exportar su quiebra globalmente. Europa, Japón, Rusia y China son sacudidas por el huracán internacional y todos los antagonismos se acentúan.
La Unión Europea es particularmente golpeada. La bancarrota capitalista de Grecia no es un caso aislado, sino que está a la cabeza de una larga serie de países de la UE con déficits enormes y deudas aplastantes: Irlanda, España, Portugal, Italia y otros. Los defaults soberanos amenazan a los bancos que son prestamistas sobre-expuestos, así como también la sustentabilidad de la Unión Monetaria Europea y todo el proyecto imperialista de integración capitalista europea. Crecen las fuerzas centrífugas que sacuden todo el edificio de la UE.
Los intentos de los capitalistas y sus gobiernos de forzar a los trabajadores a pagar por la crisis producen resistencias sociales y una intensificación de la lucha de clases. Se han impuesto medidas draconianas sobre Irlanda y un programa aún peor, en línea con el aplicado en Letonia, es presentado por las instituciones de la UE como ultimátum a Grecia. La "alternativa" de girar al FMI en busca de su "ayuda" es igualmente destructiva para las masas populares. La revuelta de diciembre de 2008 en Grecia y la brutalidad policial, un año después, contra los manifestantes que conmemoraban ese evento -incluyendo el ataque asesino de la Fuerza Especial Delta contra los trotskistas del EEK-, las detenciones masivas y los procesos judiciales manifiestan el creciente malestar social, especialmente entre la juventud rebelada, abrumadoramente desocupada o superexplotada en trabajos flexibilizados. Estas batallas son las primeras manifestaciones de un proceso político revolucionario, que puede y debe expandirse a una escala continental europea e internacional. Grecia es el espejo del desarrollo histórico mundial.
A pesar de las ilusiones esparcidas por los economistas dominantes y los medios masivos, China no es la solución a la crisis mundial, sino una parte crucial del problema.
El tremendo crecimiento de la economía china y la aceleración de la restauración capitalista fueron alimentadas por la expansión de dinero barato de los Estados Unidos, un boom en el consumo norteamericano y en exportaciones chinas basadas en una sobreproducción de capital ficticio sin precedentes.
La inyección a la economía, por parte de las autoridades del Estado chino, de un inmenso paquete de estímulo de 4 billones de yuanes el último año no se superpuso a la crisis de capacidad ociosa (por ejemplo, la capacidad ociosa en la siderurgia ya era, en 2005, de 120 millones de toneladas, más que la producción anual de Japón, el segundo productor mundial). Llevó a la formación de nuevas burbujas en la Bolsa y de especulación inmobiliaria. Las razones son estructurales. La gigantesca desproporción entre una economía dirigida a la exportación y un mercado interno inadecuado y subdesarrollado en una formación social económica todavía híbrida, ahora enfrentada a una caída internacional a la depresión, destruye cualquier intento del ala dirigente de la burocracia restauracionista del Partido-Estado chino a establecer un momentáneo equilibrio social entre clases, así como entre el campo y los centros industriales. Las tensiones y luchas sociales crecen exponiendo la falacia de una supuesta "sociedad armoniosa con un socialismo de mercado de características chinas".
Al mismo tiempo crecen las presiones del capital internacional en China, buscando una salida a su bancarrota. Las exigencias de una revaluación del renminbi de China (yuan) tienen el objetivo final de abrir los mercados financieros chinos, la expansión de un mercado interno dominado por el capital extranjero y, finalmente, la transformación de este vasto país en una semicolonia del capital norteamericano, europeo y japonés. Obviamente, tal objetivo nunca podría lograrse sin un proceso violento y prolongado de intervenciones imperialistas, presiones económicas y guerras -y sin producir una feroz resistencia y conmociones revolucionarias dentro de la propia China.
Rusia también está sometida a tremendas presiones por la actual crisis mundial, que llevó a su primera recesión seria en la década, una devaluación del rublo del 30%, la quiebra de una cantidad de empresas, la caída de oligarcas rescatados por el Kremlin y una importante caída de las reservas estatales. Después de la era Yeltsin, con la "terapia de electro-shock" del FMI, el saqueo en masa de la propiedad pública en los 90 y la centralización de la riqueza en manos de los oligarcas que llevó al default en 1998, el actual huracán internacional dio un golpe letal a la era Putin de estabilización y renovado control estatal. La elite dominante está dividida y una fracción considerable que responde al presidente Medvedev gira nuevamente a otro ciclo de privatizaciones y apertura al capital extranjero.
Los imperialismos norteamericano y europeo en sus crisis son llevados a relanzar un esfuerzo de re-colonización del amplio espacio de Europa Oriental a Rusia y China, buscando una salida a la crisis sistémica. La humanidad ha entrado en un periodo de convulsiones violentas, con un resultado incierto que se decidirá por la lucha viva entre fuerzas vitales en una escala mundial.

La guerra de Obama
Los Estados Unidos ocupan el centro no sólo de la crisis económica mundial sino también de la crisis política.
La escalada del esfuerzo bélico en Afganistán decidida por la administración Obama manifiesta tanto la continuidad como el fracaso externo de la llamada "guerra contra el terror", comenzada por la administración Bush, contra quien Obama fue votado en su momento. La "obamanía" y todas las ilusiones que rodearon al ganador del Premio Nobel de la Paz y señor de la guerra en Afganistán recibieron un golpe mortal. Es absolutamente necesario y urgente para la clase obrera norteamericana y mundial sacar un balance de esta bancarrota política.
Obama fue presentado como un opositor a las políticas de guerra en el extranjero de Bush, aunque sosteniendo a la favorita del lobby sionista, Hillary Clinton, y los tonos belicosos y la ideología imperialista del Partido Demócrata. Ahora, resucita la falacia imperial agustiniana de la "guerra justa" para justificar la continuidad de los crímenes contra la humanidad en Afganistán, Pakistán e Irak.
El nuevo Presidente fue promocionado como un nuevo Roosevelt que introduciría un nuevo New Deal keynesiano. En las condiciones de hoy, donde no sólo el neoliberalismo sino el keynesianismo que lo precedió han fracasado, esto es imposible: un nuevo Roosevelt no puede reencarnar en Obama en la Casa Blanca. El empobrecimiento en masa de los hogares norteamericanos después del desastre del mercado inmobiliario, el desempleo masivo y el fracaso seguro de la reforma de salud muestran que la administración Obama enfrenta desastres, no sólo en los frentes bélicos en Asia Central sino en el frente social en su hogar.
El imperialismo norteamericano, impulsado por el colapso de su equilibrio interno, no puede sino marchar a la guerra por el reestablecimiento sobre nuevas bases de su supremacía mundial y su "misión" imperial. Esto conlleva más guerras bárbaras y convulsiones, particularmente en Asia Central, Irán y el Medio Oriente.
Turquía juega un rol importante en los planes del imperialismo en esa región. Debemos combatir resueltamente este rol, así como la opresión del pueblo kurdo. El CRCI condena el veredicto dictatorial de la Corte Suprema y el "estado profundo" de Turquía para ilegalizar al DTP kurdo.
El esquema para una falsa solución imperialista al problema palestino ha colapsado. El gobierno más derechista en la historia de Israel continúa su salvaje opresión del pueblo palestino desposeído, el bloqueo de Gaza la instalación de nuevos asentamientos en Cisjordania. A pesar de la traición de la dirección Abbas-OLP, el pueblo palestino, aunque sin dirección, no cesó en su resistencia a la ocupación.
Se intensifican las amenazas de guerra de Israel y Estados Unidos sobre Irán, bajo el pretexto del programa nuclear iraní. Los sucesos en el país que conoció la mayor revolución popular de Medio Oriente, en 1979, han llegado a un punto crucial. El impasse y desintegración del régimen clerical, las movilizaciones después de la elección de junio de 2008, el rol de las fuerzas burguesas pro-imperialistas en la dirección de la oposición, así como las legítimas quejas de estudiantes y mujeres contra un régimen opresivo y oscurantista han cambiado dramáticamente el paisaje político de Irán. El CRCI debe seguir cuidadosamente y analizar cada paso de los sucesos para procesar y lograr una comprensión revolucionaria y una línea de intervención.
El pacifismo en el centro y el nacionalismo burgués y/o fundamentalismo religioso en la periferia son totalmente incapaces de enfrentar los peligros de la guerra y todos los desafíos de la actual situación mundial. Una movilización internacional de la clase obrera y las fuerzas populares anti-imperialistas es necesaria en la perspectiva de la revolución permanente contra la guerra permanente.

Tendencias dentro de la clase obrera y sus tareas políticas
Europa presenta en forma condensada todas las tendencias principales que se desarrollan en la clase obrera en lucha.
Huelgas de masas, movilizaciones masivas, ocupaciones de fábricas, toma de rehenes de patrones por trabajadores, revueltas de jóvenes y obreros en una cantidad de países en Europa (Francia, Italia, Grecia, Irlanda, pero también Rumania, Serbia, etc.) muestran la creciente bronca y combatividad del proletariado bajo la presión del desempleo masivo, la flexibilización laboral, las reducciones salariales, la destrucción de derechos jubilatorios, la represión estatal, etc.
El desarrollo de las luchas y la conciencia social es no lineal, distinto de país a país, contradictorio. Los partidos revolucionarios deben seguir cuidadosamente cada paso y estudiar sus tendencias internas y desarrollo mediante la intervención en las luchas con un programa de demandas transicionales, que conecte el momento presente con la lucha por el poder obrero, preparando así su victoria.
Hemos ingresado en una etapa de organización y preparación cuidadosa, metódica, sistemática, para las situaciones revolucionarias venideras.
Cualquier frente o formación partidaria "anti-capitalista" (la perspectiva sostenida por el NPA de Francia; el Bloque de Izquierda en Portugal, Syriza; y en una versión más izquierdista Antarsya en Grecia; el SWP británico y sus seguidores internacionalmente), que pretende combatir el capitalismo dentro del marco del sistema capitalista "para derrotar las políticas anti-obreras y anti-populares de sus gobiernos y de la UE" sin derrocarlos, es un fraude reaccionario.
Luchamos por el derrocamiento de todos los gobiernos capitalistas y de la imperialista UE que ha declarado una guerra de clase con sus draconianas medidas de austeridad contra todos los explotados y ha transformado al continente en la "Fortaleza Europa" contra los inmigrantes; por la derrota del empuje de los imperialistas europeos para re-colonizar Europa Oriental, los Balcanes y, más aún, la propia Rusia; para unificar sobre una base socialista a todos los pueblos europeos, desde el Atlántico al Pacífico, en unos Estados Unidos Socialistas de Europa.
Cambio climático
La Cumbre de Copenhague sobre cambio climático impulsado por la ONU fue un fiasco total e inescapable. Los líderes capitalistas del mundo demostraron que son totalmente reacios a dar el más pequeño paso a la reducción del peligro de una catástrofe ecológica, pero están preparados para desatar una represión policial bárbara contra aquellos que luchan contra este peligro mediante la acción directa en la calle, como los manifestantes que protestaban en la capital danesa.
El falso "acuerdo" final recauchutado entre Estados Unidos, China, India, Brasil y Sudáfrica es meramente una expresión vacía de objetivos vagos, sin compromiso, aparte del compromiso implícito de defender las ganancias empresariales. Pero incluso este pedazo de papel sin valor fue roto inmediatamente por Brasil y Sudáfrica, dos de los "co-firmantes".
El capitalismo mundial decadente en crisis, más codicioso de ganancias que nunca, amenaza con una catástrofe ecológica a la humanidad, a todos los seres vivientes, a la Naturaleza como "cuerpo inorgánico" de los seres humanos. No son las fuerzas productivas mismas -o sea el desarrollo de la capacidad material y mental de la humanidad para sobrepasar los límites naturales-sociales- que causan el cambio climático y los desastres ambientales, sino su mal uso, estrangulación y distorsión en manos de las relaciones sociales de producción capitalistas históricamente agotadas. El llamado "desarrollo verde" bajo el capitalismo es una forma demagógica, engañosa, de encontrar nuevas salidas para el capital excedente, sin realmente preocuparse por el medio ambiente y la supervivencia del planeta entero. Esta supervivencia y la civilización humana toda dependen ahora de una reorganización de la economía mundial sobre nuevas bases sociales de acuerdo con las necesidades de la vida y no de las ganancias de un puñado de magnates.
¡Exigimos la expropiación de toda industria contaminante sin compensación bajo control obrero!
Exigimos nuestro derecho a nuestro espacio vital, contra las monstruosidades metropolitanas.
¡Luchamos por reapropiarnos de nuestras vidas contra los vampiros del capital, por la expropiación de los expropiadores capitalistas y por el socialismo mundial!

Contra la opresión a la mujer
A pesar de que se insista con lo contrario, la opresión de las mujeres se ha incrementado en las últimas dos décadas, tanto en los países metropolitanos como en los periféricos. La decadencia y la crisis del capitalismo están conectadas indisolublemente con la crisis del patriarcado, el sexismo, el tráfico y todas las formas de violencia inflingidas sobre las mujeres.
La medida de la liberación de todos los explotados es la emancipación de las mujeres. La emancipación humana universal, el comunismo, mediante la revolución socialista mundial no puede ser lograda sin la abolición de todas las formas de opresión de género.

¿Qué Internacional?
La bancarrota capitalista mundial y sus implicancias sociales y políticas plantean, como nunca antes, la necesidad urgente de una Internacional revolucionaria del proletariado y todos los oprimidos para derrocar al capitalismo y reorganizar la sociedad sobre bases socialistas a escala mundial.
Pero esta Internacional obrera revolucionaria no puede nacer por decreto presidencial ni por la convocatoria de un Bonaparte militar populista, mucho menos un Bonaparte de un Estado burgués. La convocatoria de Chávez a una Quinta Internacional está dirigida sin base programática a un auditorio heterogéneo que cubre un amplio espectro que representa fuerzas de clase variadas y opuestas, incluyendo partidos burgueses liberales. Ya que las políticas exteriores son la continuidad de políticas domésticas, la V Internacional Socialista de Chávez aparece como la extensión internacional del PSUV chavista, un partido destinado a regimentar, contener y controlar cada una de las expresiones políticas de la clase obrera.
Esta referencia a una "V" Internacional, reconociendo de esa manera la tradición de la Cuarta Internacional fundada por León Trotsky y sus compañeros, tiene como objetivo atraer y entrampar fuerzas revolucionarias que provengan de esa tradición.
François Sabado, uno de los principales dirigentes del ex-Secretariado Unificado de la CI, ya ha respondido positivamente al llamado, aunque colocando en debate algunos puntos relacionados con los puntos de vista liberales "de izquierda" que prevalecen en Europa, particularmente en Francia en la ex LCR ahora liquidada en el NPA. De hecho, acepta que la cabeza de un Estado burgués pueda lanzar la iniciativa de una organización internacional de la clase obrera. Se rechaza toda la teoría marxista del Estado, de las clases, de la lucha de clases y de la transición al comunismo mediante la dictadura del proletariado, de un Estado que se desvanece del tipo de la Comuna de París. El próximo congreso mundial de la corriente internacional a la que está asociada Sabado está inscripta en la perspectiva liquidacionista de terminar con los restos de la tradición de la Cuarta Internacional en esa corriente.
Un camino similar es seguido por otras tendencias con una referencia trotskista (como la "Tendencia Marxista Internacional" de Alan Woods y muchos otros).
La Coordinadora por la Refundación de la Cuarta Internacional destaca que, especialmente en las condiciones actuales, la conquista, preservación y desarrollo de la independencia política de la clase obrera, de su programa, de sus organizaciones, partidos políticos y sindicatos son condición sine qua non para su lucha contra el capital, por una salida obrera y socialista a la crisis, por el poder obrero y el socialismo mundial.

Atenas, 12/12/2009

Festival del MUR a cinco años de Cromañón

El miércoles 30 de diciembre se realizó en la “Plaza del Che” el festival por el aniversario de la masacre de Cromañón. La consigna de este año fue “A cinco años de Cromañón: Ayer Bulacio, hoy Carvallo ¡Basta de represión a la juventud!”. Participaron del Festival las bandas del MUR Amaro Lucano, The Limados, La Sacrispanti y Viejos burdeles.
Los compañeros de la UJS-PO, que colaboramos en la organización del festival, nos hicimos presentes con el manifiesto de nuestro Congreso. Fue muy bien recibido entre los jóvenes presentes. La compañera secundaria Elisa, presidenta del Centro de Estudiantes del Bernandino Rivadavia, intervino en el escenario denunciando la complicidad del Estado en la masacre de Cromañón y la responsabilidad de Aníbal Ibarra, sobreseído en el juicio finalizado el pasado agosto. Puso de manifiesto la escalada represiva que está sufriendo la juventud, que tuvo su expresión en el asesinato de Rubén Carballo en las inmediaciones del recital de Viejas Locas y los numerosos casos de gatillo fácil, como el de Mabel Guerra en Villa 31. Hizo además una mención de la terrible represión sufrida por familias enteras durante el partido Newell’s-San Lorenzo.
Finalmente, llamó a los jóvenes a organizarse para enfrentar a este Estado represor y luchar contra la impunidad, la represión y la destrucción y privatización de la cultura.
Lucho

miércoles, 6 de enero de 2010

Crisis del Banco Central: Altamira denuncia que "comienzan el Bicentenario con una competencia sobre el mejor pago de la deuda"

Jorge Altamira calificó de “confiscatoria” la tentativa del gobierno de pagar deuda pública con reservas del Banco Central. Reclamó “que las reservas excedentes sean utilizadas para promover un plan de obras públicas y de industrialización gestionado por los trabajadores”. Asimismo, denunció que “la autonomía que reivindica Redrado, protegida hasta ahora por Kirchner, solamente ha servido para financiar una fuga de capitales de 40 mil millones de dólares y para proveer fondos al gobierno nacional, por 20 mil millones de dólares, para el pago de la deuda externa. En el contexto de la crisis mundial -agregó el dirigente del PO- la política de acumulación de reservas sirve a las políticas de emisionismo furioso de parte de los bancos centrales de EEUU, Japón y la UE, que además han ordenado la emisión de cuasi moneda al FMI”.
En lo relativo a la crisis política que se ha abierto, a la que calificó de “una reedición de la 125”, Altamira abogó por “la eliminación de los decretos de necesidad y urgencia y por la formación de una banca única nacionalizada bajo el control de los trabajadores”.