Rebelión estudiantil-docente en defensa de la carrera
Desde 2009 hacia acá han venido el rector, la dirección de la Facultad de Ciencias Médicas y la Coneau en franca lucha para reventar la carrera de Enfermería, buscando su privatización o la colocación de parte de ella en posgrados pagos.
La carrera universitaria de Enfermería cuenta con cinco años de cursado, pero los últimos dos (la licenciatura) son los que tienen los boletos de la Coneau comprados, para pasar a posgrados pagos.
Loa primeros intentos claros fueron la creación de las subsedes dependientes de esta facultad. Estas subsedes tuvieron un claro tinte privatizador; por un lado, un arancel mensual según la zona, y por otro un recorte abismal de contenidos. Estas subsedes fueron planificadas con el fin de financiar en forma autónoma los salarios docentes de la carrera en Rosario y así quitar un egreso a la UNR. Todo esto en planificación con el Rectorado y la Coneau. Pero las luchas de 2009 y la crisis interna de la facultad dejaron a este intento fracasado, con acusaciones de todo tipo por robo de dinero y un grupo de docentes, vinculados fundamentalmente con Franja Morada y el manejo de la escuela, con serias acusaciones. Todo ese proceso culminó ese año con la ocupación del Rectorado, exigiendo la creación de los cargos y las condiciones de cursado, ya que éste es uno de los problemas más importantes de la carrera, teniendo en cuenta que los estudiantes somos movidos de un lado a otro sin espacio físico y sin material para desarrollar las clases.
El plan de las subsedes tenía como punto fuerte que el 70% de los docentes de la carrera en Rosario, adquirieran el formato de contratados y pasaran a depender de las recaudaciones de la cooperadora y, fundamentalmente, del cobro de aranceles de las subsedes. Otra fuente de ingreso acordada para esas recaudaciones fue el pago de un subsidio de 200 pesos por alumno becado para trabajar a futuro en Pami.
2011, acelerador a fondo por el cierre de la carrera
Con este plan en crisis y sin el otorgamiento de los cargos por medio del Rectorado, el cobro del sueldo de los docentes y todas las necesidades de la escuela quedó atado al ingreso por becas. De esta manera, se paró la construcción del edificio de enfermería y se desarrolló un deterioro en toda la escuela. El plan subsedes y autofinanciamiento promulgado por el Rectorado y la Coneau llegó a su fin y dejó sin financiamiento al 80% de la carrera, sin aulas, sin condiciones de cursado, sin laboratorios y con la necesidad de reestructurar toda la carrera y privatizar lo que fuese necesario.
En este sentido, decano y rector, salieron a jugar en primera e incendiaron la facultad al comunicar que en estas condiciones tenían que cerrar la carrera. O, en otras palabras, que no estaba garantizado el cursado. Una clara provocación en búsqueda de cercenar parte de ella y negociar un recorte en los contenidos, fundamentalmente en los laboratorios.
Asamblea, huelga general y una semana de piquetes
Los docentes se declararon en huelga, exigiendo el cobro de lo adeudado y reclamando el pase a planta de los docentes que garantice el cobro de sueldo por medio de la UNR y no de la cooperadora. En una asamblea, rodeados de unos 250 estudiantes de la carrera, convocaron a la huelga por una semana. La movida docente fue tan grande que departamentos que suelen carnerear fueron presionados hasta que adhirieron. Los estudiantes se autoconvocaron en la puerta de la facultad y comenzaron un proceso de cortes de calles. En forma independiente, el estudiantado cortó todas las arterias de la facultad, realizando tres días de piquetes que contaron con la presencia de entre 100 y 150 alumnos por jornada. Superaron toda posición de controlar la movilización.
En esto, un papel muy importante jugó el grupo de docentes más progresivos, que apoyó las medidas de los estudiantes los ayudantes de cátedra y la intervención de gran cantidad de compañeros de las cursadas. Así, miércoles, jueves y viernes se cortaron las calles por toda la tarde y parte de la mañana, reclamando en primera instancia el cobro del salario de los docentes; pero, en segunda instancia, la creación de los cargos y las condiciones de cursado, lo que es en definitiva la única forma de garantizar el dictado del segundo cuatrimestre. La dirección de la facultad retrocedió en primera instancia y abonó lo adeudado a los docentes, lo cual fue, sin dudas, un logro de la movilización.
Se cierra una primera etapa, pero no hay nada resuelto
La asamblea del martes posterior tuvo dos grandes aristas. La primera que con el pago de lo adeudado y una gran presión de la dirección de la facultad lograron frenar la posición de los docentes más combativos que apoyaban medidas más duras hasta que se resuelva el real problema, que era la continuidad de la carrera la creación de cargos, no el pago de lo adeudado y, por otro, desde la dirección de la facultad y el Rectorado, juntamente con el núcleo de docentes ligados profundamente a ellos dos, trabajaron para la división y la confusión de los estudiantes, presionaron para levantar dicha asamblea y trabajaron hasta lograr desarmarla, confundieron a parte de la dirección del movimiento estudiantil manteniéndolo cuatro horas en una reunión sin sentido que terminó logrando que se desarme la asamblea estudiantil e impidieron que los estudiantes intervinieran en la asamblea docentes. Lograron así que la asamblea estudiantil se desarmara y no votara e insertaron en algunos compañeros la idea de que los cargos deben ser recortados metiendo como excusa el propio robo de dinero de las subsedes llevado adelante por docentes que están vinculados a ellos mismos. Y que no son los que trabajan al frente de una cursada cobrando 200 pesos por mes sin seguro ni obra social.
Si bien parte de los estudiantes cayó en esta confusión, ha jugado un importante papel y debe sostenerse y rearmarse ya que este impasse momentáneo no ha cerrado en absoluto el proceso que será como mínimo replanteado el próximo cuatrimestre cuando se comuniquen los recortes que el decano piensa llevar adelante. Hay que impedir que la dirección divida a los estudiantes de los docentes.
Y el centro ¿dónde está?
Otro importante elemento en este impase y casi determinante fue la nula intervención del centro de estudiantes (Alde) que se remitió sólo a aportar algún megáfono y volantes a los cortes. Se mantuvo en claro silencio en cada una de las asambleas, jamás fijo posición y no impulsó la movilización al Rectorado, dejando este planteo en un grupo de estudiantes. No recorrieron las cursadas de Medicina para informar a los compañeros de lo que sucedía, no sacaron un solo volante informativo al respecto y no convocaron a ninguna asamblea estudiantil de toda la facultad o ni siquiera de Enfermería, para discutir la continuidad de la lucha. Es sabido que el decano de la facultad ha contado con el voto del Alde y el MNR (PS) y que la política del centro de estudiantes se ha remitido en los últimos tiempos a presentar petitorios con el visto bueno del mismo decano. El cuento de que si no votamos a este decano vuelve el de la Franja es un verso al estilo K. Los estudiantes sabemos que todo lo que se consiguió en Medicina fue producto de incansables luchas y que se lograron independientemente de tener o no un decano amigo. Pero, por lo contrario, la política de no luchar por tener un decano amigo nos lleva a la derrota, al desguace de las carreras y a la entrega de la facu a la Coneau a cambio de dos o tres mesas de examen y algún bono para comer...
El avance y los acuerdos de la facultad con la Coneau no distinguen color de decano. Y para terminar con ellos lo que necesitamos es un centro de estudiantes que convoque a asambleas, que luche, que ponga al estudiantado en la calle y no que trabaje acuerdos con la dirección de la facultad.
Exigimos inmediata ruptura con la Coneau
Exigimos la creación de todos los cargos necesarios, la construcción de la escuela de Enfermería, el rechazo a todo intento de privatizar la carrera o recortar contenidos. Exigimos todas las condiciones de cursado.
Cargos para los laboratorios. Ningún recorte.
Becas para todos los estudiantes en los cinco años, sin condicionamientos monetarios del Pami y la Nación. El aumento de las becas en un 100%.
La creación del cuerpo de delegados.
El Antídoto (Rosario)