Un sector de la concurrencia del acto en la ciudad de Santa Fe. El Frente de Izquierda es un factor político.
El miércoles 27 y jueves 28, Jorge Altamira recorrió dos de las ciudades más importantes de la provincia, Rafaela y Santa Fe capital.
En Rafaela, se reunió con distintos sectores de trabajadores, con una repercusión especial entre los metalúrgicos, el corazón de la clase obrera de Rafaela. Los trabajadores denunciaron la precarización laboral, el ataque a las condiciones de trabajo y la persecución sindical. También se abordó la paritaria de la UOM, el paro del 9 de junio y la necesidad de impulsar cuerpos de delegados independientes, de la mano del desarrollo de una alternativa política de los trabajadores.
También se realizó una exitosa conferencia de prensa a la que asistieron los principales medios, dando cuenta del rol que ha pasado a jugar el Frente de Izquierda como factor político en la ciudad. A la noche, una charla en el centro de Rafaela contó con nutrida y variada concurrencia. El primer orador fue nuestro candidato a concejal local, Pablo Rodríguez, un reconocido activista metalúrgico, seguido por nuestra candidata a diputada provincial y dirigente de Amsafe Rosario María Elena Molina. El cierre estuvo a cargo de Jorge Altamira, quien advirtió sobre la situación de bancarrota en que se encuentra el país. También analizó las perspectivas que plantea la inmensa lucha de los aceiteros, a la cual consideró "una revolución al interior de la clase obrera", en el marco del intento del Estado K de regimentar las paritarias, subordinándolas a la "estrategia macro" de Kicillof, orientada a sostener el pago de la deuda.
En la ciudad de Santa Fe, Altamira visitó distintos medios locales y a la noche fue el orador principal de un acto con más de 150 asistentes. Participaron representantes de organizaciones sociales y territoriales que se están acercando al Frente de Izquierda, así como de otros movimientos de lucha de la ciudad, como organismos de derechos humanos, inundados y asambleístas ambientales.
Abrió el acto Elías Ruffener, dirigente de la UJS y candidato a concejal por Santo Tomé, quien denunció la situación de precariedad de los barrios santotomesinos y la persecución policial a la juventud, y destacó el gran crecimiento que estamos teniendo. A continuación, Pablo Vallejo, candidato a concejal por Santa Fe, reseñó las principales luchas que se vienen dando en la ciudad, y nuestro rol en ellas: contra el trabajo precario, las inundaciones, en defensa del medioambiente y del espacio público, contra los tarifazos, contra la impunidad y por la situación de la mujer. María Elena Molina desarrolló la experiencia recorrida por los movimientos de lucha en la provincia y la importancia del ingreso de un representante del Frente de Izquierda a la Legislatura provincial.
En el cierre, Altamira denunció el reciente desembarco de gendarmería en la provincia: "se crea un estado de militarización que ya ha fracasado; en México, el ejército se hizo cargo de la lucha contra el narcotráfico y no consiguió sino que prospere el narcotráfico y se infiltre en el ejército (...) El Estado es cómplice del narcotráfico: si, en vez de crear empleo, se puebla el país de casinos, se favorece el lavado de dinero, se lo está invitando a venir". También remarcó las consecuencias que ha tenido la privatización de los puertos por parte del gobierno "socialista" de Santa Fe: "los exportadores de granos evaden y subfacturan, y el río Paraná es el gran queso gruyére del narcotráfico, una avenida libre" que ha favorecido intereses sociales concentrados.
Destacó que los partidos del régimen están instalados en el poder político en los últimos 30 años, empeorando todo, y aun así se presentan como el cambio. "La derecha sólo puede ganar porque ha fracasado el progresismo de Binner y Bonfatti", y vaticinó que "si Del Sel gana la provincia, Perotti (PJ) se va con él, ya que el PRO es el peronismo en su variante más degenerada".
"En Santa Fe hay una gran dependencia de la soja y las ganancias van a la especulación inmobiliaria. Hay que ir con todo a la lucha para que ingrese María Elena Molina a la Cámara de Diputados. Se va a unir a las provincias de Córdoba, Salta, Mendoza, Santiago del Estero, Neuquén, Capital Federal y Buenos Aires, donde ya hay bloques legislativos del Frente de Izquierda. Es un progreso extraordinario".
El paso de Altamira y María Elena Molina actuó como un fuerte impulso a las dos semanas de campaña que quedan por delante
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