"La planta va a seguir tomada hasta que no tengamos una solución"
Martín Lallard, delegado de la Comisión Interna de Mahle Rosario
Martín Lallard, delegado de la Comisión Interna de Mahle Rosario
- ¿Cómo llegan a la ocupación?
- Se origina y se profundiza en febrero y marzo, cuando empezamos a negociar, por el tema de las suspensiones que tomábamos como forma de preservar la fuente de trabajo. Hasta el 28 de abril íbamos a ser suspendidos. Cuando el cuerpo de delegados va al Ministerio de Trabajo en una visita rutinaria, se encuentra con la notificación de Buenos Aires del cierre de la planta. Nos cayó como un baldazo de agua fría, porque hasta hacía 15 días estábamos negociando con la empresa por las suspensiones, a las cuales la gente accedió para evitar los despidos. Pero nos volvieron a mentir.
La problemática de Mahle es compleja. Más allá de la crisis, teníamos síntomas que se estaba generando un vaciamiento y también que se esta desvirtuando los procesos de producción (en la parte de los aros) donde en todo el mundo se hace de una manera y acá se cambio.
- ¿Cómo van a seguir?
- Por ahora con la seccional Rosario, estamos bien. Está apoyando, está participando de todo lo que venimos haciendo. Sabemos que hay diferentes conflictos en otras fábricas y si la UOM nacional no larga un plan de lucha en lo inmediato sabemos que el futuro de los laburantes se ve bastante comprometido en este punto. La planta va a seguir tomada hasta que no tengamos una certeza que dejamos esto para ir a descansar y que cuando volvamos nos volvemos a encontrar. Esta ocupación se da de forma pacifica. Queremos que venga alguien y tome un compromiso serio y saque a la empresa adelante.
Publicado en Prensa Obrera nº 1081 (30/4/2009)
- Se origina y se profundiza en febrero y marzo, cuando empezamos a negociar, por el tema de las suspensiones que tomábamos como forma de preservar la fuente de trabajo. Hasta el 28 de abril íbamos a ser suspendidos. Cuando el cuerpo de delegados va al Ministerio de Trabajo en una visita rutinaria, se encuentra con la notificación de Buenos Aires del cierre de la planta. Nos cayó como un baldazo de agua fría, porque hasta hacía 15 días estábamos negociando con la empresa por las suspensiones, a las cuales la gente accedió para evitar los despidos. Pero nos volvieron a mentir.
La problemática de Mahle es compleja. Más allá de la crisis, teníamos síntomas que se estaba generando un vaciamiento y también que se esta desvirtuando los procesos de producción (en la parte de los aros) donde en todo el mundo se hace de una manera y acá se cambio.
- ¿Cómo van a seguir?
- Por ahora con la seccional Rosario, estamos bien. Está apoyando, está participando de todo lo que venimos haciendo. Sabemos que hay diferentes conflictos en otras fábricas y si la UOM nacional no larga un plan de lucha en lo inmediato sabemos que el futuro de los laburantes se ve bastante comprometido en este punto. La planta va a seguir tomada hasta que no tengamos una certeza que dejamos esto para ir a descansar y que cuando volvamos nos volvemos a encontrar. Esta ocupación se da de forma pacifica. Queremos que venga alguien y tome un compromiso serio y saque a la empresa adelante.
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