Por Sabrina Santarcángelo
En estos días se están discutiendo las paritarias del sector más importante de trabajadores en el cordón industrial, aquellos que trabajan en las cerealeras y en los puertos, por donde sale más del 80% de las exportaciones de cereal junto a los puertos de Campana.
La CGT San Lorenzo, enrolada en la CGT Moyano, junto a la Federación Nacional Aceitera, están reclamando un 42% de aumento para los aceiteros de casi todo el país y para el convenio Copa. Este convenio regional abarca a una importante parte de los trabajadores que están en el complejo agroexportador, en su mayoría sometidos a la tercerización.
La cámara patronal aceitera (Ciara) ha ofrecido el 24%, ajustándose al techo exigido por Cristina. Aún sumando la reducción del pago de ganancias en un 5% de promedio, sigue estando muy por debajo del reclamo.
Por su parte, el Sindicato Aceitero de San Lorenzo, integrado a la CGT K, que se encuentra fuera de la Federación nacional y tiene afiliados a la mayoría de los efectivos de las empresas aceiteras locales, también está discutiendo con la misma cámara empresaria, pero por separado, un aumento salarial del 38,8%.
La CGT 17 de Octubre, encuadrada en la CGT Balcarce, plantea la extensión de la discusión paritaria hasta fines de mayo y separadamente, para que el costo de la lucha lo pague el resto y negociar luego el mismo monto, más unos pesos, como hizo el año pasado.
El gobierno nacional, en complicidad con las patronales, dilata la discusión extendiendo la conciliación obligatoria y, simultáneamente, la cámara empresaria estira la negociación aceitera local por dos razones: una es la zanahoria de la reducción del pago de ganancias, lo cual significa sólo el 5% de ingreso; la segunda cuestión es darle tiempo a los grandes consorcios del cereal para que puedan seguir exportando en plena cosecha gruesa, a costa de sostener el sistema de tercerización.
El otro reclamo anunciado por la CGT San Lorenzo y la Federación Aceitera, en ocasión del paro del 31 de marzo, fueron los accidentes y muertes obreras; este tema está cobrando cada vez mayor importancia por los nuevos accidentes trágicos en diferentes fábricas.
En este sentido, se puede avanzar con la consigna "basta de muertes obreras", que movilizó una y otra vez a los trabajadores del cordón, mediante la creación de protocolos de seguridad en todos los lugares de trabajo que permitan el cese de la producción en caso de riesgo de accidente.
Después de varios años de vigencia, la ley de comités mixtos del gobierno "socialista" de Santa Fe mostró que es cartón pintado a la hora de frenar los accidentes laborales.
Hoy más que nunca es necesario un paro general de los trabajadores de todo el cordón y un congreso de delegados y activistas de todos los gremios de la región, para organizar la lucha de conjunto por el 40% de aumento salarial y 15.000 pesos de mínimo para todos. No al techo salarial. Por el pase a planta permanente de todos los tercerizados y contratados. Por la creación de protocolos de seguridad. Ni despidos ni suspensiones, reparto de las horas de trabajo. Por la abolición del impuesto al salario y el 82% móvil.
Como ocurrió con el parazo del 31M y con todas las luchas en el cordón, el Partido Obrero en el Frente de Izquierda está impulsando una enorme agitación que ayude a una intervención de conjunto del movimiento obrero.
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