Apoyemos la ocupación de Naranpol

Los obreros de Naranpol ocuparon las siete plantas que tienen en el país.

Esta empresa, cuya casa central está en la ciudad de Santa Fe, es la tercera en el mercado nacional de aguas gaseosas y ocupa, en total, unos 800 trabajadores.

Los dueños, la familia Galán, luego de la muerte de su antiguo titular Carlos Galán (un reconocido kirchnerista, ex candidato a vicegobernador de Santa Fe con Bielsa en 2007), la llevaron a una crisis terminal. Hoy está en convocatoria de acreedores y todos los obreros suspendidos sin pago de sus salarios. Los medios periodísticos hablan de una deuda salarial por 5 millones de pesos y una deuda total de 120 millones de pesos.

Los hijos, que se hicieron cargo de la empresa, acusaron de la crisis a los obreros por los "altos costos laborales" y propusieron un plan de reactivación de la producción sobre la base de un furibundo ataque a los salarios y condiciones de trabajo. Desconocer el actual convenio, acordar una rebaja salarial y 140 despidos. Además de un subsidio de 30 millones de pesos.

La extorsión fue masivamente rechazada por los trabajadores, quienes iniciaron un plan de lucha hasta la toma de las plantas.

Como parte de esta lucha, un grupo de trabajadores se movilizó a Rosario donde cortaron el puente Rosario-Victoria y luego fueron a escrachar a Binner, quien había declarado que era "un conflicto privado".

Qué planteamos

Además de defender la fuente de trabajo y los puestos laborales, se juega el cobro de los salarios.

La dirigencia del sindicato (Sutiaga), que pediría la quiebra junto al movimiento de empresas recuperadas que dirige Caro están impulsando la cooperativización de la empresa. Para este fin, están manteniendo reuniones en el Ministerio de Desarrollo de la Nación y en el Ministerio de Trabajo de la Provincia. Mientras tanto, el Estado tiene que hacerse cargo en forma inmediata de las deudas salariales (octubre y noviembre) y de los aportes previsionales. Mientras Binner mira para otro lado para evadir esta responsabilidad, la burocracia pretende poner que esa deuda pague la cooperativización -es decir, una expropiación de los trabajadores.

"La reforma de la Ley de Quiebras (...) legitima la confiscación de las deudas salariales y previsionales del vaciador (Prensa Obrera Nº 1.188, 4/8).

Planteamos: expropiación definitiva de Naranpol y entrega gratuita a sus trabajadores (cuyos créditos laborales deben ser preservados); salario de convenio, obra social, jubilación y derechos sindicales similares al resto de los asalariados.

Carlos Blanco