La izquierda detrás de los privatizadores
El viernes 30 de septiembre se realizó el congreso ordinario de la Federación Universitaria de Rosario. La Franja Morada, después de cuatro años consecutivos, perdió la federación a manos de un frente entre el FEI (agrupación de medicina vinculada con el PS), el Alde-PCR, el Darío Santillán y el MNR de Giustinian. Crisis entre las camarillas En el congreso se puso de manifiesto una crisis profunda entre las fuerzas que componen a nivel provincial el Frente Progresista Cívico y Social, que también gobiernan la UNR.
Las camarillas se presentaron en cuatro listas distintas; incluso el PS fue dividido. El sector de Giustiniani integró la lista ganadora, mientras el sector de Binner presentó otra lista que obtuvo 18 votos. La crisis provincial entre los radicales y el PS se trasladó, entonces, al congreso. Un privatista en lugar de otro Los diarios destacaron el carácter del frente ganador. "Desde el Frente "Recuperemos la FUR" denunciaron " la política llevada adelante por el rectorado de la UNR controlado por una alianza entre la UCR (rector Darío Maiorana) y el Gobierno nacional (vicerrector Eduardo Seminara)" (La Capital, 2/10). Lo que el comunicado y los diarios no dicen, sin embargo, es que el FEI, la cabeza de este frente opositor, y el MNR, comparten el mismo programa que los radicales, como se ve en Medicina, donde junto con Maiorana, son los principales impulsores de la acreditación a la Coneau. La han convertido en la facultad con mayor cantidad de posgrados de la UNR, uno de los planes de estudio más devastados de las facultades de Medicina del país, con docentes terriblemente precarizados y pésimas condiciones de cursado. El FEI llevó adelante en medicina la misma política que los radicales desenvuelven en cualquiera de las facultades.
¿La agenda de la FUR en manos de quién?
El principal argumento de la izquierda (Alde y Darío Santillán) para sellar esta alianza con el PS es que la conducción "real" estará en la mesa representativa (que incluye a los 12 centros) y no en la presidencia. "Será una conducción colegiada, con un presidente más que nada nominal, y con amplios consensos políticos" (Página/12, 2/10). Nos preguntamos, qué acuerdos y consensos a favor de los estudiantes pueden emerger de esta alianza. Esta izquierda no podrá imponer en la FUR una agenda contra la privatización y la destrucción de la educación pública, porque sencillamente la izquierda todavía controla menos cantidad de centros de estudiantes (5 de 12) de los que dirigen las agrupaciones agentes de la privatización. Por ejemplo: ¿cuál será la posición de la mesa representativa de la FUR en relación a las acreditaciones de la Coneau, los malos salarios, el boleto interurbano cuando la mayoría de las fuerzas en esa mesa son quienes desenvuelven estas políticas? Por otro lado, esta izquierda argumenta que la federación no será una correa de transmisión de las políticas de Maiorana y la UCR. Inevitablemente, una FUR planteada en estos términos, pasará a ser una correa de transmisión de las políticas del PS, Binner y Giustiniani: ataque a la educación pública, negar el 82% móvil para nuestros jubilados, depredación ambiental, explotación y tercerización laboral en los puertos, para nombrar solo algunos ejemplos. Los estudiantes que votaron en los centros de estudiantes a esta izquierda para luchar en defensa de la educación, deben mirar con mucha atención esta alianza que los subordina a camarillas y agrupaciones que constantemente embaten contra la universidad pública.
Defendamos la UNR
Para la UJS-PO, en cambio, se trata de confrontar con todos los sectores que impulsan la privatización. Invitamos a todos los estudiantes a discutir este balance con la UJS.
Nazareno Marengo
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