La Lista 7 oficialista de la CTA Rosario ha decidido postular al degennarista Jorge Acedo en el orden provincial y a Gustavo Teres en el orden local. La Lista 7, que en las elecciones pasadas de la CTA integró la Lista 2 de oposición a Yasky y De Gennaro, ahora ha decidido pegar sus listas con la 1 de Micheli. La decisión profundiza el retroceso político de la CTA de Rosario.
De Gennaro es co-responsable junto a Yasky de la bancarrota de la CTA. Mientras Yasky ata el futuro de la central a una alianza política con los Kirchner, la lista de Micheli-De Gennaro quiere atar su destino a la alianza con otro bloque político patronal del que participan, entre otros, Binner, Alfonsín, Proyecto Sur, el GEN y la Federación Agraria.
En función de esta orientación estratégica, en su momento, la CTA Rosario reivindicó haber colaborado para que el PJ fuera relevado en el gobierno provincial por el Frente Cívico binnerista.
Posteriormente, Acedo salió a defender al gobierno del Frente Cívico y postuló a Binner como “un buen candidato presidencial para 2011”, en el mismo momento en que miles de docentes y estatales estaban en huelga por el salario contra este gobierno negrero.
La CTA Rosario defendió con uñas y dientes la ley de los truchos comités mixtos de Seguridad e Higiene del binnerismo, colaborando en su redacción y propaganda e integrando “técnicos” al ministro de Trabajo, pero en ningún momento denunció que este gobierno sigue mirando para otro lado mientras decenas de obreros mueren por accidentes laborales, como ocurrió en la construcción en Rosario o en empresas tercerizadas, aceiteras y camioneros del cordón de San Lorenzo.
Todo lo que hacen es amenazar a las empresas con “sanciones económicas” que, además, son irrisorias.
Es esta política de “apoyo crítico” al binnerismo es la que explica por qué la CTA Rosario nunca convocó a un paro regional en momentos en que estaban las condiciones y era necesario.
No lo hizo cuando luchas emblemáticas así lo reclamaban, como fue la huelga y ocupación de la planta de ICI en San Lorenzo, el Lavadero Virasoro, Mahle, Paraná Metal, o por el salario y la reapertura de las paritarias.
Binner definió claramente que sus aliados no son los trabajadores sino los grupos agroexportadores como Vicentin, Cargill, Dreyfus y otros, a los que les permitió que impongan sus propias leyes de flexibilidad laboral en los puertos y cordones industriales.
Pactó con el reutemismo para mantener la impunidad de los asesinatos de 2001 y descargar la crisis sobre los trabajadores con tarifazos e impuestazos. Arregló con la burocracia de Maguid para que siga manejando las cajas negras y la estructura del Estado.
Se enfrentó a las luchas de los maestros y estatales por el salario y el pase a planta. Binner le soltó la mano a todos los conflictos obreros como Mahle, Balbazoni y Paraná Metal, solamente para nombrar algunos.
Los activistas de la CTA deben saber que esta decisión de la Lista 7 de integrarse a la Lista 1, con boleta pegada, es un golpe a sus propias reivindicaciones. Los integrantes de la desaparecida Lista 2 han llegado a conclusiones políticamente similares, aunque han elegido caminos dispares. Todos los que plantearon “cavar trincheras” con la burocracia sindical desde una organización independiente (MIC) han decidido disolver esa organización independiente y contribuir con las listas de la burocracia sindical. Unos han elegido a Yasky, otros a De Gennaro.
La línea la conocemos: plenarios discursivos y ni un paro real por Malhe, Virasoro, Paraná Metal, ni por la reapertura de paritarias en ATE.
Es necesaria otra orientación para la CTA Rosario. Por un Congreso de Bases de la CTA. Por la ruptura con el gobierno provincial, por un plan de lucha que supere las marchitas de apoyo y defienda un programa de independencia de las patronales y de sus gobiernos. Hay que rechazar el acuerdo con De Gennaro votando la Lista 3, una perspectiva clasista y de lucha.
De Gennaro es co-responsable junto a Yasky de la bancarrota de la CTA. Mientras Yasky ata el futuro de la central a una alianza política con los Kirchner, la lista de Micheli-De Gennaro quiere atar su destino a la alianza con otro bloque político patronal del que participan, entre otros, Binner, Alfonsín, Proyecto Sur, el GEN y la Federación Agraria.
En función de esta orientación estratégica, en su momento, la CTA Rosario reivindicó haber colaborado para que el PJ fuera relevado en el gobierno provincial por el Frente Cívico binnerista.
Posteriormente, Acedo salió a defender al gobierno del Frente Cívico y postuló a Binner como “un buen candidato presidencial para 2011”, en el mismo momento en que miles de docentes y estatales estaban en huelga por el salario contra este gobierno negrero.
La CTA Rosario defendió con uñas y dientes la ley de los truchos comités mixtos de Seguridad e Higiene del binnerismo, colaborando en su redacción y propaganda e integrando “técnicos” al ministro de Trabajo, pero en ningún momento denunció que este gobierno sigue mirando para otro lado mientras decenas de obreros mueren por accidentes laborales, como ocurrió en la construcción en Rosario o en empresas tercerizadas, aceiteras y camioneros del cordón de San Lorenzo.
Todo lo que hacen es amenazar a las empresas con “sanciones económicas” que, además, son irrisorias.
Es esta política de “apoyo crítico” al binnerismo es la que explica por qué la CTA Rosario nunca convocó a un paro regional en momentos en que estaban las condiciones y era necesario.
No lo hizo cuando luchas emblemáticas así lo reclamaban, como fue la huelga y ocupación de la planta de ICI en San Lorenzo, el Lavadero Virasoro, Mahle, Paraná Metal, o por el salario y la reapertura de las paritarias.
Binner definió claramente que sus aliados no son los trabajadores sino los grupos agroexportadores como Vicentin, Cargill, Dreyfus y otros, a los que les permitió que impongan sus propias leyes de flexibilidad laboral en los puertos y cordones industriales.
Pactó con el reutemismo para mantener la impunidad de los asesinatos de 2001 y descargar la crisis sobre los trabajadores con tarifazos e impuestazos. Arregló con la burocracia de Maguid para que siga manejando las cajas negras y la estructura del Estado.
Se enfrentó a las luchas de los maestros y estatales por el salario y el pase a planta. Binner le soltó la mano a todos los conflictos obreros como Mahle, Balbazoni y Paraná Metal, solamente para nombrar algunos.
Los activistas de la CTA deben saber que esta decisión de la Lista 7 de integrarse a la Lista 1, con boleta pegada, es un golpe a sus propias reivindicaciones. Los integrantes de la desaparecida Lista 2 han llegado a conclusiones políticamente similares, aunque han elegido caminos dispares. Todos los que plantearon “cavar trincheras” con la burocracia sindical desde una organización independiente (MIC) han decidido disolver esa organización independiente y contribuir con las listas de la burocracia sindical. Unos han elegido a Yasky, otros a De Gennaro.
La línea la conocemos: plenarios discursivos y ni un paro real por Malhe, Virasoro, Paraná Metal, ni por la reapertura de paritarias en ATE.
Es necesaria otra orientación para la CTA Rosario. Por un Congreso de Bases de la CTA. Por la ruptura con el gobierno provincial, por un plan de lucha que supere las marchitas de apoyo y defienda un programa de independencia de las patronales y de sus gobiernos. Hay que rechazar el acuerdo con De Gennaro votando la Lista 3, una perspectiva clasista y de lucha.
Carlos Blanco
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