Apenas conocido el fallo absolutorio de los trece acusados en la causa por la desaparición de “Marita” Verón, una ola de repudio popular se alzó por todos los rincones de nuestra ciudad.
Rápidamente, desde las organizaciones populares, sindicales y de izquierda se armó una convocatoria para movilizarse al día siguiente. Por otra parte, también los funcionarios municipales y provinciales salieron a convocar a un acto en la plaza Pringles, donde los principales oradores fueron la intendenta Mónica Fein (PS), la vicepresidenta del Concejo, Norma López (FPV) y María Eugenia Schmuck (UCR). Con la presencia del gobernador Bonfatti y de Hermes Binner. Este acto fue ampliamente difundido en los medios locales, al mismo tiempo que silenciaron la convocatoria a la movilización del resto de las organizaciones. En este “actito”, que no pasó de las 200 personas, los funcionarios del FAP y del Frente para la Victoria se dedicaron en sus intervenciones a encubrir sus propias responsabilidades. Le echaron todo el fardo a la Justicia y resaltaron, hipócritamente, la figura de Susana Trimarco y su lucha por la aparición de su hija.
En cambio, en la movilización y en el acto convocado por las organizaciones populares y de izquierda -que reunió más de 1.000 personas y que recorrió todo el centro-, se denunció la vinculación de la Justicia con el poder político tucumano, se exigió el desmantelamiento de las redes de trata, y la aparición con vida de “Marita” Verón y de todas las desaparecidas.
Desde el Plenario de Trabajadoras denunciamos, además, que en nuestra provincia continúan desaparecidas 100 mujeres por las redes de trata, que el turismo sexual en el norte de la provincia -encubierto bajo los tours de caza, con los prostíbulos desplegados a lo largo de todos los puertos sobre el Paraná- se mantienen al amparo de los funcionarios policiales y judiciales, con un entrelazamiento profundo también con el poder político. Que el FAP no ha desmantelado una sola red en la provincia ni ha rescatado a las víctimas. Que su denuncia del fallo judicial tucumano abona la misma teoría del kirchnerismo para encubrir sus responsabilidades. Exigimos también la condena de los imputados y el juicio y castigo al gobernador de Tucumán, José Alperovich; a su antecesor, Julio Miranda, y al capomafia Rubén “La Chancha” Ale.
Queda más claro que nunca que en nuestra provincia ni el Fap de Binner ni el Frente para la Victoria representan una salida para las mujeres que luchan contra la explotación sexual, contra la violencia de género o contra la esclavitud laboral. Que sólo con la organización independiente de estos partidos y sus representantes podremos vencer la impunidad y avanzar en el camino de la liberación de toda opresión contra la mujer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario