El jueves 13, los trabajadores de Mahle Rosario realizaron, con el apoyo de diferentes organizaciones, una contundente jornada de lucha por el pago de los salarios adeudados. Al acampe, que llevaba varios días en la puerta de Mahle de Rafaela, se le sumó el corte de la autopista Rosario-Buenos Aires y una concentración en la puerta del Ministerio de Trabajo, mientras se desarrollaba la negociación con la empresa. La lucha decidida de los trabajadores de Mahle, dio como resultado el compromiso de la empresa de pagarles todo lo adeudado. Los trabajadores tienen claro que este fue un paso importantísimo, aunque sigue planteada la lucha de fondo por la defensa de la continuidad de la planta y de los puestos de trabajo. A continuación reproducimos la entrevista con Roberto Campos, de la Comisión Interna.
-¿Cómo está la situación del conflicto luego de la jornada de lucha del jueves 13?
-La empresa cumplió su palabra de depositar los 1.000 pesos que se había comprometido a pagar, y el viernes (21) estamos cobrando la quincena de agosto y el resto que falta junto con el aumento de UOM también. La verdad que la movida de ayer (por el jueves 13) fue muy buena. Nosotros pensamos que la empresa no iba a venir, que iba a mandar a algún abogado, pero se presentó con el gerente de recursos humanos de Mahle Argentina, fue una negociación dura. Es increíble que en vez de estar negociando aumentos estemos negociando sueldos (...)
Se empezó a amontonar gente en la puerta, comenzaron a llegar los compañeros, le avisamos que cortamos la autopista a la empresa para que sienta la presión de la gente, que no les iba a ser fácil salir del Ministerio de Trabajo. Les avisamos que cuando termine el corte de la autopista, todos los compañeros se iban a acercar al Ministerio y no iban a poder salir de ahí hasta que no decidan pagar los sueldos, o que hagan una propuesta seria para nosotros poder llevarla a la asamblea. Siguió un poco más la negociación, y a eso de las 20.30 horas la empresa tira la propuesta de los 1000 pesos. Nosotros veíamos que era insuficiente, pero había mucha gente que no tenía dinero para comer. Salimos, fue tirado en la asamblea con los compañeros en la puerta del Ministerio de Trabajo y fue aceptada, con el condicionamiento de que paguen el aumento UOM y las deudas que tenían con nosotros. La empresa aceptó, y bueno, ahí se descomprimió la situación.
-¿Ahora van a discutir la continuidad de la fábrica?
-Sí, como les decía a los compañeros, no hay que confundir las cosas: el día viernes fue por el sueldo, nosotros vamos a seguir con la lucha por los puestos de trabajo, que es lo que nos interesa, y así seamos 50, nosotros vamos a pelear por los puestos de trabajo, porque para eso somos delegados, y no me va lo que dicen los diarios, de que está bien sólo la indemnización. Nosotros, los delegados, siempre vamos a pelear por los puestos de trabajo y nada más que eso. El miércoles 19 nos reunimos en Buenos Aires aparentemente nos espera Tomada o Débora Giorgi, junto con Antonio Caló, secretario general de la UOM, para tener una reunión y discutir bien el tema de los puestos de trabajo.
-¿Cómo fue el acampe en Rafaela?
-El acampe en Rafaela fue durísimo, más allá de que nos ha sorprendido el apoyo y la solidaridad de la gente de la ciudad de Rafaela y de los trabajadores de Mahle de allá. No hubo problema. Los trabajadores hicieron una asamblea, plantearon nuestra situación y ellos decidieron automáticamente solidarizarse con nosotros, nos trajeron alimentos, bebidas. Fue una experiencia inolvidable para todos, muy dura porque hizo dos grados bajo cero el primer día que llegamos. Estábamos con mucho frío, pero mantuvimos la lucha, los compañeros resistieron y sirvió, porque conseguimos lo que queríamos. Fue una experiencia que no tiene palabras para explicarlo, es cuestión de vivirlo. Pero, bueno, con lucha y con fuerza se consiguen cosas, conseguimos los sueldos y ahora vamos por el otro objetivo, el más importante, que es el de mantener los puestos de trabajo.
-¿Qué te parece la propuesta de convocar a un plenario junto a organizaciones populares y otras fábricas que están en situaciones parecidas?
-Creo que está bueno, yo lo voy a plantear al cuerpo de delegados, lo vamos a tener en cuenta y lo vamos a discutir. Esta lucha yo creo que va a salir bien, y que sirva de ejemplo para todos, de que hay muchas barreras que se pueden romper, que la UOM acceda a petitorios que no se venían haciendo y a muchas cosas que no está acostumbrada a colaborar con los trabajadores.
Yo creo que todo sirve y ojalá sirva de ejemplo, y podamos ser más ejemplo aún si salimos victoriosos de esto.
Damián Blanco
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