martes, 30 de diciembre de 2008

FMI, dólar, Cobos, Kirchner

No hay político profesional que no se encuentre en una activa campaña para las elecciones de renovación legislativa en octubre próximo. ¿Pero bajo qué gobierno: el de los Kirchner o el de Cobos?
La intención de dirimir la cuestión de la presidencia en los próximos meses no la oculta nadie. Cuando Duhalde hace suyo el reclamo de toda la oposición oficial (y la complicidad del engendro Lozano-Juez-Ibarra-Tumini) de que el dólar sea llevado a 4,50 pesos y se firme un acuerdo con el FMI, tiene perfectamente claro que un ‘golpe de mercado' de esas dimensiones se lo lleva puesto al matrimonio. Por eso estos opositores repiten ante quien quiera escucharlos que Cobos no debe renunciar -por aquello de las obligaciones institucionales. Cavallo le dijo abiertamente a Mauro Viale, en Canal 26, que el mendocino de las maratones se las había pasado conspirando durante toda la crisis sojera. El propio Duhalde habla de un gobierno ‘pos-crisis', o sea luego que la devaluación acabe de licuar a los pingüinos.
El ‘defol' de la Transportadora de Gas del Norte (TGN) es parte de la escaramuza. El gobierno dice que la tuvo que intervenir para asegurar la prestación de los servicios, pero la verdad es que el ‘defol' de la controlada por Techint y Total, apunta a darle manija a una corrida contra el peso - Cobos sería funcional al gran negocio de estas dos, que no es otro que volver a hacer andar la explotación de gas y petróleo boliviano y con ello la ampliación de la Transportadora.
Daniel Artana, el vocero del lobby neo-liberal FIEL, acaba de anticipar que Argentina está "caminando hacia el FMI", algo que debería ocurrir a más tardar en marzo. La alternativa sería que los Kirchner declararan el ‘defol' de la deuda de 2009 y 2010, lo cual, según Artana, desataría una estampida de capitales hacia afuera.
Los Kirchner conocen todo este paño, por eso necesitan echarlo a Cobos y dejarle la sucesión presidencial a Pampuro. La intervención a TGN es una advertencia para que no los corran por ese lado, aunque ya Mastellone advirtió que se apresta a anunciar su propia cesación de pagos.
De todos modos, no es por medio de veedores en las empresas que los Kirchner podrán evitar que se los desahucie. Cualquier observador internacional les puede decir que la fase en curso de la bancarrota mundial se caracteriza por el hundimiento de los llamados países emergentes, que son objeto de una frenética fuga de capitales. No solamente ocurre esto en Europa oriental, sino que las más afectadas son Rusia y China -y en América Latina, Brasil y México. Lula ya adoptó una prevención que conocemos muy bien: decidió otorgar un seguro de cambio a los grandes pulpos para que una nueva devaluación no dispare la deuda externa de éstos en reales. Es lo que hizo Cavallo en 1982 y luego avaló Alfonsín, con el resultado de que toda la deuda privada quedó estatizada. La salida de capitales de Rusia es tan intensa, que se estima que puede evaporar para fines de 2009 reservas del orden de los 500.000 millones de dólares. El destino de esta fuga es recapitalizar a los bancos de los países centrales y proveerlos del tesoro de guerra por el control del sistema financiero mundial. Incluso en China ha comenzado una salida importante de capitales. Es esta onda la que llevaría a la mega devaluación en Argentina, al acuerdo con el FMI y al gobierno de Cobos. Sería el doblar de las campanas para Chávez, Lugo, Morales.
En algunos mentideros políticos se comenta que los Kirchner estarían dispuestos a que se los tumbe para luego cargar el desastre de la devaluación sobre sus tumbadores. Así parecieron insinuarlo cuando perdieron con la 125. En cualquier caso, lo que importa es que sería la demostración final de la incapacidad de esta camarilla para defender los intereses nacionales con los que hace gárgaras todas las mañanas (mientras entrega los glaciares a las mineras). La tendencia a la capitulación del matrimonio gubernamental es tan manifiesta que el jefe de la bancada parlamentaria, Agustín Rossi, acaba de presentar un proyecto de ley para derogar las retenciones a la soja. Sería el derrumbe fiscal que sólo podría ser superado por una devaluación monetaria.
De cara al estallido de la crisis financiera, económica y política en los próximos meses advertimos a los trabajadores de la labor golpista y pro-imperialista de la oposición patronal de centro-derecha y de centro-izquierda, y por otro lado de la irrevocable incapacidad del kirchnerismo a la bancarrota capitalista en curso y la conspiración golpista en desarrollo. Lo acaba de probar en General Motors, donde pretende imponer, por medio del Ministerio de Trabajo y la burocracia del Smata, el despido de los trabajadores bajo contrato.
En oposición a la política de despidos y suspensiones de los Kirchner, y de concesiones al capital, por un lado, y en oposición a las andanzas golpistas de la oposición fondomonetarista, por el otro, llamamos a los trabajadores a reclamar un plan de lucha a las centrales obreras para que la crisis la paguen los capitalistas, y sobre esta base a organizarse en forma independiente de la burocracia de los sindicatos, y a oponer al golpismo fondomonetarista la reivindicación de un gobierno de trabajadores.
Jorge Altamira
Publicado por Prensa Obrera digital nº 2

No hay comentarios: